Un rumor que llegó a oídos de los investigadores judiciales locales ubicaría a Leandro Sacco (23) en Brasil, aunque desde la Dirección Nacional de Migraciones, que se encuentra en contacto con la Justicia de San Francisco, no registran su salida hacia países limítrofes. Si lo hizo, utilizó otras vías de acceso para salir del país.

Si bien su búsqueda por parte de la Policía se volvió menos intensa, la Fiscalía de Delitos Complejos sigue recolectando pruebas a través de testimonios y se espera por el resultado del análisis de las prendas de la menor de 17 años que denunció a Sacco de abuso sexual.

La causa sigue firme, pese a que el imputado no se haya presentado para brindar su versión de los hechos. Y ya pasaron 22 días desde el sábado 14 de agosto en que se sucedieron los hechos que denunció la presunta víctima.

¿Quién protege a ‘Leo’ Sacco? ¿Por qué parece habérselo tragado la tierra? Los investigadores aseguran que el nivel de protección hacia el joven es muy alto, algo no tan común en estos casos. Al menos en nuestra ciudad. Para mantenerse oculto necesita mucho dinero y además una cadena de encubridores.

Desde la Justicia se basan para sostener esta teoría en que se sucedieron más de 20 allanamientos hasta el momento, en diversos lugares y el fugitivo no aparece, ni desde su entorno dan muestras de que vaya hacerlo.

Prófugo

Leandro es hijo de Victor Sacco, un pastor evangélico del templo "Jesús Salva" en San Francisco, y está acusado de haber drogado y abusado sexualmente de la adolescente, quien ratificó en Cámara Gesell días atrás lo denunciado.

En una entrevista con El Periódico, su papá Víctor había asegura que su hijo iba a presentarse ante la Justicia luego de que declarase la joven, aunque consideraba que su hijo no tenía garantías. Pero hasta ahora sigue prófugo.

Aunque no aparezca, la investigación sigue su curso con la realización de peritajes y la toma de testimonios. En base a lo primero, se espera por los resultados de análisis químicos en las prendas de vestir de la denunciante que podrían ser clave, según sostienen las fuentes.

Por otra parte, pasaron algunos testigos surgidos de la declaración de la menor, además de otros aportados por la defensa, los que habrían estado momentos antes y el después del presunto hecho.

Sacco, al mantenerse prófugo, no puede dar su versión de cómo fueron los hechos, por lo que la investigación sigue basándose en la denuncia en su contra. En este punto, desde la Justicia recalcan que la indagatoria es un medio de defensa y no de acusación.

Cabe recordar que en este contexto, el fiscal Alberione se encargó de señalar que la negativa de Sacco a presentarse complica su credibilidad, aunque subrayó que el imputado tiene todas las garantías que le otorga la ley.

La denuncia

Según la denuncia, la adolescente habría estado en un local nocturno junto a amigos y al joven ahora acusado, a quien conocía, con el cual se retiró del lugar. Se investiga si posteriormente ambos se subieron al auto del hombre para ir a dar una vuelta, compraron una cerveza a la que –se presume en la investigación- el denunciado le agregó una pastilla (sedante o ansiolítico) para luego cometer el abuso ante la indefensión de la mujer.

Tras el hecho, el supuesto abusador dejó a la joven en la zona céntrica y con el paso de las horas, al enterarse de la denuncia en su contra, se fugó. Días después Alberione ordenó su detención y la consiguiente búsqueda de paradero al declararlo prófugo.