Omar Francone tiene 75 años, es jubilado y trabaja desde los 14, la mayor parte del tiempo el mercado de los muebles. Fue el impulsor del emprendimiento familiar que se dedicaba a fabricar juegos de living en un amplio galpón ubicado en calles Carrá y Pasteur de barrio La Milka.

El pasado 8 de marzo, por causas que se investigan, un voraz incendio se desató dentro de la fábrica y consumió casi todo el galpón, poniendo en riesgo gran parte de la estructura. Una semana después del hecho, tres generaciones de la familia Francone continúan trabajando entre las ruinas de lugar, tratando de apuntalar algunas paredes que quedaron, pero ya retiraron casi todas las chapas del techo y pusieron en venta el terreno.

Pese a todo, Omar sostiene que continuarán trabajando, mientras realiza gestiones para lograr un crédito o algún tipo de ayuda del Estado ante la catástrofe que padecieron.

En diálogo con El Periódico, Francone manifestó que “esto-señalando las paredes oscuras- tenemos que tumbarlo todo y venderemos el terreno, hay una parte que pudimos apuntalar y resistió. Estamos buscando alquilar algo o ver si nos pueden ayudar momentáneamente en lugar, para seguir con esto porque gracias a Dios tenemos una buena clientela por la que queremos seguir”.

Pérdidas millonarias

Según cálculos que hizo el propio hombre, las pérdidas para el emprendimiento familiar fueron millonarias, “sumando todos los daños al galpón, las máquinas, materia prima, y mercadería ya para entregar, fueron entre seis y ocho millones de pesos las pérdidas. No quedó nada, nos arruinó”, expresó claramente conmovido.

Además de Omar, su hijo Lucas y su nieto Tomás pretenden resurgir de las cenizas y continuar trabajando. “La idea es seguir pero no acá. Se estaba quemando el galpón y nos robaban las cosas, los cables. Estuve 20 años en este lugar y la inseguridad fue empeorando. Así que buscamos conseguir unas máquinas que son fundamentales y después empezaremos con el material que vayamos comprando, de a poquito”, confió.

La firma, según Francone, contaba con una buena clientela en distintas localidades de la provincia de Santa Fe, Chaco y muchos particulares de San Francisco y alrededores.

“Fui a la Municipalidad para gestionar alguna ayuda, no quiero que me regalen nada, todo lo devolveremos, si es necesario tapizaremos todas las dependencias municipales, pero necesitamos trabajar”, comentó.

Mientras tanto, la familia se encuentra buscando algún galpón donde volver a empezar y pidieron la solidaridad de la comunidad, aquellos que puedan ayudar al emprendimiento pueden contactarse al 3564 62 50 60. “Es el celular de mi hijo-contó Omar- el mío se quemó el día del incendio con un dinero que tenía preparado para que el flete lleve nuestra mercadería. El fuego arrasó todo”.