Víctimas baleadas, apedreadas y atacadas por patotas. En la calle, en un baile, fuera de un boliche o en una cancha de fútbol. La violencia urbana pone en alerta a quienes se encargan de la seguridad pero además al personal de salud, sobre todo del Hospital Iturraspe, que es donde llegan los heridos.

Una joven de 18 años debió ser intervenida quirúrgicamente al recibir un disparo en una pierna el pasado 3 de julio, en Gerónimo del Barco e Hipólito Yrigoyen. Ahora, ya en su casa, lleva adelante su recuperación: “Está muy dolorida y aterrada. Incluso necesita un psicólogo para recuperarse”, contó su madre a El Periódico.

Un hombre identificado como Franco Nicolás Peralta (27) fue detenido al estar sospechado de ser quien baleó a la mujer y su grupo de amigos en plena calle, aparentemente en un intento de robo.

También en el mes de julio, cinco jóvenes atacaron a otro de 23 años en Garibaldi y Cabrera. Por los golpes recibidos tuvo que ser hospitalizado luego de quedar inconsciente. Los agresores resultaron detenidos.

En otro violento hecho, el 10 de julio, en Las Malvinas y Potosí, un adolescente de 16 años fue atacado a piedrazos por otra patota y sufrió lesiones en su cabeza. Se encontraba internado con pronóstico reservado en Terapia Intensiva del hospital “Jaime Ferré” de Rafaela.

Pero no todo ocurre en horas de la noche. También durante el día se dieron episodios preocupantes. Por ejemplo, en la Liga Amateur de Fútbol sobre fines de mayo un jugador agredió a un árbitro y una semana después, ya en junio, se produjeron serios incidentes fuera de la cancha de La Milka entre dos hinchadas, lo que obligó a suspender algunas semanas la competencia.

Es imposible olvidar el homicidio de Cristian Robledo ocurrido en 2019, también en medio de una competencia amateur de fútbol tras una gresca entre jugadores e hinchas dentro de un campo de juego.

Se trata de una serie de hechos, muchos recientes, que evidencian un nivel de violencia extremo en San Francisco. La violencia urbana, cabe destacar, es la principal causa de muerte intencional en la provincia de Córdoba.

El hospital, donde todos llegan

Valentín Vicente, director del Hospital Iturraspe de San Francisco, confirmó la gravedad en los hechos de violencia urbana, aunque dijo que “no son extraños” a la guardia del nosocomio: “Si bien con las redes sociales estos hechos se reflejan más, no tengo dudas de que existe un aumento de violencia de todo tipo, sumado a los accidentados que es cosa de todos los días. Esto de pegarle un tiro a una joven para robarle el celular, una pelea en eventos que no debieran ser violentos, en un partido de fútbol. A nosotros nos alarma por la gravedad de los hechos”, señaló a El Periódico.

El médico explicó que las guardias de viernes a domingos “son pesadas” ante la cantidad de casos y aseguró que el hospital está preparado para atenderla.

Vicente indicó además que al personal de salud le apena esta realidad: “Estos hechos de violencia como baleados, golpeados sin razón, gente joven que muere, que se trunque una vida por una discusión sin importancia no nos entra en la cabeza. Y esto nos apena”, afirmó.

Violencia urbana: “No podemos desatender las situaciones que la desencadenan”