La periodista Agustina Sosa (33) denunció en la últimas horas al concejal de Río Segundo Valentín Espíndola (Hacemos Unidos por Córdoba) por violencia de género, violencia psicológica y verbal por lo ocurrido en una sesión del Concejo Deliberante en esa localidad.

Según relató la mujer, el pasado viernes cubrían una asamblea en el edificio legislativo junto a su pareja, Alexis Chiechi (37), cuando fueron increpados por el edil oficialista.

"Sonreí en un momento de la exposición, él (Espíndola) ya estaba fuera de eje en toda la sesión, le pegó a la mesa y me dijo 'de qué te reis, yo cuando hablas vos no me río'", explicó la periodista en diálogo con Cba24n.

La profesional dijo que las agresiones de Espíndola fueron aumentando hasta pedir que la prensa se fuera del recinto legislativo. A lo que el titular del cuerpo, Ricardo Granja, se negó y las agresiones se trasladaron a las afueras del edificio.

Toda la violenta secuencia quedó grabada por la cámara de Chiechi, que registró la sesión el viernes a la noche.

La denuncia quedó radicada en la Unidad Judicial de Río Segundo.
La denuncia quedó radicada en la Unidad Judicial de Río Segundo.

Sin embargo, Sosa aseguró que la peor amenaza llegó al salir del edificio cuando terminaron de dar el informe periodístico y apagaron la cámara.

“Como si fuera poco: además de agredirnos, inventaron que nosotros éramos los que estábamos amenazándolos, llamaron a patrulleros y motos policiales. Cuando se fueron los policías, Valentín Espíndola nos volvió a amenazar a nosotros”, relató en sus redes sociales. 

"Lo que me impulsa a hacer la denuncia es pensar que si así tratan públicamente a una periodista siendo filmados en vivo, y también maltratan a la concejal de la oposición, qué pueden llegar a hacer con empleadas becadas y con otra mujeres que dependen de ellos", afirmó Agustina Sosa.

La periodista responsabilizó por la legitimación de la violencia al intendente Darío Chesta, quien está al frente de la administración municipal desde el 2019.

La denuncia que se presentó en la Unidad Judicial de Río Segundo incluye un pedido de restricción de acercamiento.