Permanece internado en Villa María el joven que en la mañana del sábado pasado fuera atacado con un ladrillazo en la cabeza sobre bulevar Sáenz Peña al 3000.

Según contó Juan Capellino, uno de los hermanos, a El Periódico, el adolescente se encuentra bien: “Él ahora, gracias a Dios, está bien. Ayer una doctora le estuvo haciendo masajes en el pecho y es como que se puso nervioso, se empezó a mover para todos lados y le apretaba la mano fuerte. También anoche la dejaron pasar a mi mamá a verlo. Mi mamá le empezó a hablar y se ve que le conoció la voz y se puso loco, golpeaba la cama, se quería quitar los cables. Espero que siga así y que vaya mejorando, sin complicaciones”.

Sobre lo que pasó explicó que “él estaba con una chica y un amigo dando vueltas en moto y cuando pasaron por las estaciones de servicio que están por la rotonda lo salieron a correr en una moto Titán. Mi hermanito se bajó de la moto, no sé cómo fue, pero salió corriendo, y por Sáenz Peña, como llegando para Las 800, en una esquina, donde hay una carnicería, ahí le pegó el ladrillazo y lo dejó tirado en la vereda con la cara cortada, sin conocimiento, desfigurado”.

Nosotros sabemos quiénes fueron. Si yo supiera por qué lo lastimaron así… ellos son más grandes que él, para ellos era un nene”, agregó.