Parece que la cadena de supermercados Walmart decidió ser noticia cada mes de febrero en San Francisco. Hace un año, El Periódico revelaba que la empresa había conseguido que le otorguen la factibilidad de radicación en un predio perteneciente a la firma Codini. La noticia generó varias polémicas que duraron casi un año y terminó con la decisión de Walmart, que iba a llegar con la denominación Changomas, de dejar a un lado sus proyectos.

Uno de los puntos principales por lo que se enfrió la llegada de la firma extranjera fue la falta de acuerdo con los representantes de Codini. Fuentes consultadas por este medio en plena negociación indicaron que no se pusieron de acuerdo en una serie de puntos, lo que demoró el comienzo de la obra. Además, no habría caído bien en el seno de la familia propietaria del terreno las derivaciones políticas que tuvo este tema. Cabe recordar que un diputado nacional presentó un proyecto para que la expropiación del predio de la ex Fábrica Militar, que el grupo empresario privado Héctor Codini SA adquirió en la década del 90.

Pero esto parece que ya historia. Otro febrero llegó y con él algunos indicadores de que Walmart tendría nuevas intenciones de radicarse en la ciudad y ya habría pedido la factibilidad a la Municipalidad.

Este medio pudo confirmar que el expediente Walmart fue retirado del cajón donde estaba para volver a manos del secretario de Gobierno municipal, Miguel Pesce, quien debe otorgar la factibilidad para que la empresa pueda radicarse si cumple con las normas vigentes.

Po otra parte, fuentes del Centro Empresarial y de Servicios (CES) le indicaron a El Periódico que hace 15 días llegó el comentario a la entidad de que la empresa extranjera buscaba un nuevo terreno para desembarcar. ¿Será más que un verano esta vez?

Nueva ubicación

En el caso que Walmart decida instalarse debe volver a comenzar todos los trámites para obtener nuevamente la pre-factibilidad de radicación, la que había conseguido a principios de 2012 y que ahora intentaría conseguir.

En septiembre del año pasado el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que establece límites a las posibilidades de instalación de grandes superficies comerciales. La norma marca las zonas prohibidas y permitidas para que se localicen los nuevos emprendimientos dentro del radio urbano de la ciudad.

El objetivo es que lo hagan en la periferia, es decir, alejarlos del área céntrica, tal como lo pidió alguna vez el CES.

Se decidió que fuera de la zona de exclusión de agroquímicos podrán instalarse grandes superficies comerciales.