Delincuentes saquearon el pasado lunes por la noche un almacén en Santa Fe mientras velaban al propietario del mismo, que había fallecido pocas horas antes. El repudiable hecho se produjo en el barrio de Colastiné Norte, según publica el diario El Litoral

El diario señala que todo comenzó en horas de la siesta del lunes cuando se produjo el fallecimiento de Carlos Rubén Girolimeto, un muy querido y respetado vecino del sector. Su buena fama se debía no sólo a que desde hacía algunos años regenteaba un kiosco-almacén, sino a su alta dosis de generosidad, a disposición del todo el mundo. La noticia sumió en un profundo dolor a toda esa comunidad que decidió acompañarlo para darle su último adiós.

Pero cuando estaban en medio del velatorio, pasadas las 20, otra noticia volvió a golpearlos. Delincuentes habían atacado el negocio del infortunado, donde provocaron destrozos y robaron mercaderías, lo que generó indignación entre los asistentes al sepelio.

“Ha fallecido un gran amigo... una gran persona. Carlos era muy querido en el barrio y también fuera de él. Pero apenas lo trajeron para la sala velatoria pasó un hecho terrible. Asaltaron su casa, rompieron sus puertas, revolvieron todo y robaron”, dijo una mujer entre lágrimas. 

“No se puede creer tanta maldad. Es un barrio donde vive gente de bien. Y no sé ahora cómo vamos a seguir. Porque acá se cruzó una barrera. Quizás quienes hicieron esto es gente que el ayudaba desde su pequeño negocio. Entonces todo duele el doble”, sentenció.