Pedido de una abuela por ayuda para su nieto con adicciones: advierten que no es un caso aislado
La mujer pide una internación urgente para el adolescente de 13 años. “Está perdido”; dijo. La historia revelada por El Periódico se viralizó en redes y una especialista alertó que la situación no es aislada.
Una mujer de San Francisco vive con angustia la situación de su nieto de 13 años, inmerso desde hace tiempo en el consumo problemático de drogas. La abuela —cuya identidad se resguarda—denunció públicamente la situación con un pedido claro: internación urgente del menor, antes de que sea demasiado tarde.
Según relató a El Periódico, el adolescente ya estuvo internado en el área de Salud Mental, pero fue dado de alta sin que se le pueda hacer seguimiento. Desde entonces, su situación se agravó. “Está perdido. A nosotros nos robó todo. A la madre el domingo le robó una planchita y no sé qué otras cosas más”, contó.
Además, contó que en los últimos días el joven irrumpió en su casa de forma violenta: rompió vidrios y agredió físicamente a su abuela. La mujer teme por la seguridad de los otros chicos del hogar. “Tengo miedo por sus hermanitos. No quiero que esto termine peor”, expresó con angustia.
El reclamo no esconde las responsabilidades del adolescente. Al contrario, su abuela afirma: “Yo reconozco todos los errores que él comete, no le tapo nada. Pero es un niño. No puede tener más poder que una jueza, un fiscal, un asesor. Necesitamos que alguien actúe”.
La mujer aseguró que la familia recibió un acompañamiento parcial por parte del Área Local de Niñez y Adolescencia y de un terapeuta, pero sin intervenciones concretas.
Pese a todo, el menor habría pedido ayuda y eso abre la puerta a la esperanza, ya que según relatór regresó a su casa y le dijo a su madre que quiere internarse. “Él sabe que no está bien. Está pidiendo ayuda”, contó su abuela.
Una realidad extendida
El caso tuvo un fuerte impacto en la comunidad y se viralizó rápidamente en redes sociales. Desde la organización Madres Territoriales, su presidenta Andrea Carrasco advirtió que no se trata de un hecho aislado. “Se conoció porque se hizo público, pero no es el único, como ese hay infinidades y tristemente la realidad golpea fuerte, ya que cada vez son más chicos los que están dentro de este círculo nocivo”, afirmó.
Carrasco también apuntó a otras adicciones poco visibilizadas: “En esta oportunidad hablamos de consumo de sustancia, pero de lo que no se habla es de la adicción que también hace estragos en nuestra sociedad y en nuestros adolescentes, la ludopatía, la cual también afecta la salud mental”.
Según explicó, su organización recibe diariamente consultas por casos complejos: “El 90 por ciento para solicitar ayuda por algún familiar con episodios de esquizofrenia y consumo de drogas, llamados psiquiátricamente patología dual”.
En su postura, cuestionó que el sistema actual tiene muchas limitaciones: “En los escasos lugares que hay son tratamientos abiertos, en hospitales comunes, donde el paciente decide si se queda o se va”.
Carrasco reclamó cambios urgentes en las políticas de salud mental: “Es necesario reformar la ley de salud mental y permitir que se creen nuevos sistemas de internación cerrados y monovalentes, estamos invitadas a ser parte de este proyecto presentado por distintos bloques en la Legislatura de Córdoba para que sancione con fuerza de ley”.
Estragos del pipazo
En relación a las sustancias más consumidas entre jóvenes, fue tajante: “Las drogas más usadas por los adolescentes y jóvenes son el alcohol, el tabaco, la marihuana, un porcentaje en cocaína, pero el mayor número es con el crack, también conocido como ‘paco’, o el ‘pipazo’ y está haciendo estragos. En todas las clases, pero sobre todo de las clases medias para abajo”.
También subrayó que la situación abarca también a Frontera y Josefina y consideró que hay falta de coordinación entre municipios vecinos: “Eso hace más difícil las gestiones porque para el Estado siguen siendo los de acá y los de allá. Para la sociedad son los faloperos o craqueros o ya son conocidos con el rótulo de rata o choro. Para las familias siguen siendo el ser amado que la droga arrebató”.
Carrasco también advirtió que hay desigualdad de género en el acceso al tratamiento: “Para el hombre es más fácil conseguir lugar para internarse, ya que hay más espacios para hombres que para mujeres. Pero desde hace unas semanas adonde se llame, en cualquier punto del país están colapsados y no hay camas disponibles”.
Y subrayó la importancia del trabajo preventivo y la participación de las familias: “Que las familias asistan a las actividades que se invitan, para conocer, adquirir herramientas y sacar velos. Llegan desesperados una vez que la situación salió a la luz, pero cuando los convocás para que aprendan y sepan cómo accionar solo un grupo menor asiste”.
“Sí existe la segunda oportunidad”
Desde su experiencia personal, Carrasco resumió: “Asociación que presido desde hace 8 años con compromiso y conocimiento, madre de un adicto recuperado, nadie me lo contó, lo vivimos en carne propia y sabemos lo que siente”.
“Trabajamos arduamente en el acompañamiento y fortalecimiento familiar de personas atravesadas por el consumo, el año 2024 llegamos a más de 100 familias con el proyecto Una madre en cada barrio”, agregó.
Y concluyó: “Tenemos un grupo de madres capacitadas para realizar esta labor que hacemos desde el corazón. Estamos convencidas que otra realidad es posible, que sí existe la segunda oportunidad, estamos fortalecidas en la fe, como madres marcamos territorio de conquista para la recuperación de una generación”.
Centro RAAC San Francisco
Desde julio de 2024 funciona en la ciudad un Centro RAAC Centro de Adicciones (Red Asistencial de las Adicciones de Córdoba), ubicado en Garibaldi y Suipacha. El espacio brinda atención, prevención comunitaria y orientación a familias. Atiende martes a jueves de 8 a 13 y trabaja de forma articulada con instituciones sociales, religiosas y sanitarias.