La profesión de panadero es una de las más antiguas que se registran en el mundo, el talento de unir ingredientes con el amasado perfecto y la cocción adecuada sigue más vigente que nunca, ya que los panes y productos relacionados están entre los preferidos en nuestro país, más allá de los constantes aumentos en los precios por la inflación.

En un rincón de la Panificadora Tomás, en barrio Sarmiento, en medio de hornos y el aroma a masa recién horneada, se encuentra Fernando Passera (55), obrero panadero con una trayectoria de 38 años en el oficio. Con amplia experiencia, este trabajador ha sido testigo de los cambios y avances que han transformado su profesión en el último tiempo.

Asegura que siente orgullo de ser uno de los tantos responsables de hacer el pan que consumen en la mesa tantos sanfrancisqueños, aunque también reconoce que cada vez son menos los obreros panaderos jóvenes, ya que el oficio “es sacrificado”, sobre todo, por los horarios de elaboración.

De vender en la calle a elaborar el pan

La historia de Fernando en el rubro comienza hace más de tres décadas cuando de adolescente se vio en la necesidad de buscar “alguna changa” para ayudar a su familia. Las prioridades en su casa pasaban por otro lado, por lo que era una necesidad también colaborar con la economía del hogar.

“A los 15 años vendía diarios en la calle los sábados y domingos. Hasta que un panadero en mi barrio, en ‘las 800’ -Roque Sáenz Peña- le habló a mi mamá que necesitaba alguien que lo ayude y bueno, así arranqué. No estoy arrepentido, fui haciendo camino en esto y acá sigo”, dice con una sonrisa.

Fue así como ingresó tímidamente al mundo de la panadería, sin imaginar que esta elección marcaría su vida.

Fernando Passera, panadero de profesión: “Faltan jóvenes que se interesen por el oficio”

Este obrero panadero pasaría por diferentes firmas donde tuvo la oportunidad de adquirir nuevas habilidades y conocimientos.

En sus primeros años, el trabajo no era sencillo. Fernando recuerda con nostalgia cómo cada día se levantaba de madrugada para comenzar su jornada que terminaba a media mañana.

“El horario sigue siempre igual -sostiene- a las 2 de la mañana, a veces un poquito más temprano, dependiendo las fechas. Lo que sí fue cambiando fue la forma de elaboración, porque tiempo atrás se cocinaba con horno a leña y ahora están los hornos rotativos. El calor todavía está, pero después afloja, más en invierno”.

"Antes era todo a mano, mucho más pesado y agotador", agrega Fernando mientras mira con admiración las modernas máquinas que ahora lo asisten en su trabajo. "Hoy, las máquinas nos ayudan a que no sea tan duro físicamente", agrega.

Luego de finalizar su turno en la panadería, Fernando se embarca en la tarea de repartir la mercadería que él mismo ha panificado. Es un extra que lo ayuda en la difícil situación que atraviesa pero que realiza con gusto, de ver el fruto de su trabajo en distintas despensas o kioscos de la ciudad.

Un oficio que necesita jóvenes

El panadero también se refiere a la preocupante falta de jóvenes en el rubro. "Hoy hay un faltante de obreros panaderos más jóvenes que se interesen por el oficio. Pasa que los chicos por ahí quieren salir y este trabajo requiere ser responsable. Es una linda tarea, a mí me permitió mantener a mi familia y crecer en la vida. Si hay alguien interesado en el rubro, consejos de mi parte no les va a faltar", se sincera.

A pesar de los desafíos y las largas horas de trabajo, Fernando es un hombre lleno de gratitud por su profesión que también muestra orgullo por la tarea de sus pares y a los que saludó en su día.

Con una mirada esperanzadora hacia el futuro, Passera desea que la tradición panadera no se pierda y alienta a los jóvenes a sumarse a ese mundo de sabores y texturas.

Fernando Passera, panadero de profesión: “Faltan jóvenes que se interesen por el oficio”

Por qué se celebra cada 4 de agosto

Se celebra el 4 de agosto porque se recuerda la primera vez que se creó un sindicato de su rubro, para defender los derechos de sus trabajadores.

Fue en 1887 que se fundó en Buenos Aires la Sociedad Cosmopolita de Resistencia y Colocación de Obreros Panaderos, el primer sindicato nacional de la profesión.

Cabe remarcar que esta fecha tiene un anclaje con el anarquismo ya que fue impulsada por los italianos Errico Malatesta y Ettore Mattei, quienes crearon la Sociedad como espacio de resistencia y lucha para conseguir mejores derechos laborales.