Mientras el intendente Damián Bernarte (52) se recupera -ya en su domicilio- del ataque sufrido el pasado 6 de noviembre cuando recibió un disparo de arma de fuego en pleno centro, la causa por el atentado sigue su curso.

El único detenido al momento es Carlos Lucato (52), odontólogo de profesión, quien se encuentra imputado por intento de homicidio. Según informó este jueves el fiscal Bernardo Alberione, será indagado el próximo 28 de noviembre. Tras ello, se decidirá su situación procesal.

Respecto a la causa, Alberione confirmó que Bernarte testimonió que “habría sido (Carlos) Lucato quien le disparó con un arma de fuego, que es lo principal para poder seguir trabajando”. Luego informó que el arma de fuego utilizada ese día no apareció y que no se descarta otra nueva declaración del intendente ya que en esta primera oportunidad fue un encuentro breve: “Se habló lo que se pudo porque tiene dañadas sus cuerdas vocales, ya que ha sido entubado”.

El fiscal habló de la importancia de las cámaras de seguridad urbanas que llevaron claridad a la investigación, sobre todo aquellas que pertenecen a privados. Sobre la ropa que se le secuestró a Lucato, señaló que es “muy similar” a la vestimenta que se puede observar en las imágenes a las que tuvieron acceso.

También Alberione apuntó a que el móvil corresponde a la “esfera privada” descartando un trasfondo político y de otra índole: “No cambia el hecho que sea una cosa u otra lo que motivó el disparo de Lucato hacia Bernarte. Los motivos –agregó que aún no están tan claros- por resguardo de las personas involucradas se van a mantener en reserva”, aclaró.

Por último, el fiscal de Delitos Complejos informó que tienen teléfonos secuestrados, descartó que otra persona haya participado del intento de homicidio y manifestó que al momento no tienen conocimiento de si había amenazas previas hacia el intendente. También destacó el papel de la Brigada de Investigaciones y la Policía de la departamental San Justo.

¿Qué pruebas complican al detenido?

- En primer lugar, la declaración de la propia víctima.

- Grabaciones de varias cámaras de seguridad privadas que reconstruyen que el imputado merodeó la zona durante más dos horas.

- Además las imágenes muestran que hubo una discusión y especie de forcejeo previo en calle.