Un relevamiento de homicidios realizado por El Periódico confirma que es un mito que la mayoría de los asesinatos se producen en situaciones de robo. Pese a que estos son recurrentes tanto en San Francisco como en Frontera, cualquiera sea su modalidad (cuentos del tío, arrebatos, asaltos).

De los últimos 15 homicidios sucedidos, contando a ambas ciudades, sólo dos fueron consecuencia de un intento de robo. Ocurrieron en San Francisco y fueron víctimas Avelino Sufía (80) y Rolando Margaría (60). En ambos casos fue a plena luz del día; el primero en horas de la siesta y el segundo temprano a la mañana.

De los 13 restantes se destaca un femicidio, el de María Eugenia Lanzetti; un hecho confuso, el de María Belén Cuello y 11 muertes por ajustes de cuenta, venganza o pelea, donde las víctimas fueron Nicolás Guía, Santiago Dávila, Nicolás Giurda, Matías Dercarli, Matías Toloza, Gerardo Ochoa, Tomás Santillán, Cristian Mana, Maximiliano Almada y Germán Lozada y Martín “Pitín” Chamorro, estos dos últimos aparecidos quemados dentro de un automóvil el año pasado.

Menores por todos lados

Tres de las víctimas fatales eran menores de edad. Nicolás Guía tenía 15 años, Matías Toloza 14 y Tomás Santillán 16. El primero fue asesinado en barrio Parque tras ser atacado por otros dos menores de edad, quienes le arrojaron una piedra de manera salvaje tras hacerlo caer al piso. El segundo murió al ser apuñalado por otro adolescente de su misma edad. El tercero murió a causa de un balazo en la nuca. Los tres hechos sucedieron el año pasado.

Como se observa, en dos de los tres hay presencia de menores de edad como victimarios. Y en el total de los 15 homicidios, existe participación de menores en cinco.

Diez casos con detenidosDe los crímenes citados, sólo cinco siguen en etapa de investigación. En algunos hubo detenidos momentáneos, como en los homicidios de Cristian Mana y Maximiliano Almada. En otros se trata de todo un misterio, como el doble crimen sucedido el 20 de enero de 2015, cuando aparecieron calcinados en el interior de un auto en Frontera (a unos dos kilómetros del basural de esa localidad) los cuerpos de Germán Lozada y Martín “Pitín” Chamorro. Ambas víctimas tenían numerosos antecedentes policiales y eran oriundas de Santo Tomé (Santa Fe), aunque residían por ese entonces en Frontera.

El de María Belén Cuello es otro enigma. El cuerpo de la mujer oriunda de Freyre, fue hallado el viernes 9 de enero, también de 2015, en proximidades del cruce entre calle Sastre y la autovía 19, de Frontera. Su muerte fue catalogada como “dudosa”, ya que del lugar del hallazgo no surgió que se trate ni de un suicidio, ni de una muerte natural o una muerte violenta producto de un homicidio. El cuerpo presentaba un avanzado estado de descomposición.

Armas utilizadas

En ocho de los casos citados se utilizaron armas de fuego. En uno, el arma homicida fue una piedra o ladrillo, y en cinco casos se utilizaron armas blancas. Uno es de carácter dudoso.