Hacerse de abajo: dos historias de emprendedoras locales
Crece el emprendedurismo en San Francisco apoyado por el municipio local que días entregó $150.000 a 35 vecinos de la ciudad para proyectos productivos. Dos vecinas utilizarán el dinero para comprar una máquina en uno de los casos y para mercadería, en otro.
Días atrás, la Municipalidad de San Francisco entregó 35 créditos de 150.000 pesos para emprendedores de la ciudad, en una inversión que demandó más de $5.000.000, pero que permitirá a vecinos y vecinas arrancar o potenciar sus proyectos productivos.
Tal son los casos de Nancy Almada y Maribel Fissore, con dos emprendimientos diferentes pero con las mismas ganas de seguir en el camino del crecimiento y el trabajo.
En el caso de Nancy, su emprendimiento Le Blanc, productos textiles y decoraciones para el hogar, nació en plena pandemia y se fue desarrollando, con el microcrédito otorgado comprará una máquina para agilizar sus trabajos.
La joven de 25 años contó que el emprendimiento nació en pandemia, “con mi hermana tenemos una peluquería y el encierro nos obligó a buscar nuevos ingresos. Había telas en casa y algunas máquinas, así que empezamos con la confección de manteles, almohadones y venderlos por las redes”, comentó.
Luego agregó que con la propuesta del Consejo de la Mujer y las ferias de Mujeres emprendedoras, participaron de un primer evento que les permitió darse a conocer. Y aunque las hermanas continúan trabajando en peluquería, el emprendimiento forma parte de un ingreso extra muy importante para sus vidas.
El microcrédito
Almada valoró la posibilidad de acceder al crédito a través de la Secretaría de Desarrollo Económico y Educativo, de 150.000 pesos, a tasa cero y con dos meses de gracia. Para el emprendimiento Le Blanc, servirá para comprar una máquina remalladora que, según la mujer, agilizaría mucho el finalizado de los trabajos.
“El crédito está genial, porque primero que es a tasa cero, cuotas fijas, tenés dos meses de gracias y que por ahí para monotirbutistas como nosotras se nos hace difícil acceder a un crédito bancario. Con esas condiciones nos va a permitir poder comenzar a usar la máquina, producir, vender y juntar la plata para empezar a pagar el crédito”, destacó.
El emprendimiento de una pareja
En el caso de Maribel Fissore y su marido Diego Molina, ambos trabajan en relación de dependencia, pero desde hace unos años se iniciaron con Casa de Vinos, regalos empresariales y presentes. Para ellos, el crédito les permitió comprar una buena cantidad de mercadería para los regalos especiales de fin de año.
En este sentido, Maribel contó que “nuestro emprendimiento empezó representando a una bodega de vinos de Mendoza, luego fuimos incorporando otros vinos y productos que vendíamos a amigos y conocidos. Pero de a poco empezamos a innovar, armando regalería, boxs para distintas fiestas, sobre todo lo más fuerte es el día del Padre, Navidad y fin de año, pero también fuimos incorporando regalería para cada ocasión”.
También con la pandemia, Casa de vinos se fue fortaleciendo como un ingreso más para la pareja: “Cuando no se podía trabajar, las redes sociales nos ayudaron a vender y nos hicimos más conocidos. Le dimos forma al espacio y ahora contamos con un showroom para dar a conocer nuestras propuestas para vender al público, además que distribuimos a algunos comercios marcas de la bodega”, sostuvo.
Fissore subrayó el trabajo en conjunto que durante estos años fueron generando con otros emprendedores.
Sobre el microcrédito, manifestó: “Nos interesó, fuimos a la convocatoria y está muy bueno la propuesta de ayudar a la gente que trabaja, esto genera una rueda de trabajo que es beneficiosa para la comunidad. Recomiendo que la gente se anime y presente sus proyectos porque ayuda mucho”.
Contactos
Le Blanc contacto 3564 57 4162. Instagram: le_blanc_21
Casa de vinos, Falucho 1046, barrio 9 de Septiembre. Contacto: 3564 47 0426. Instagram
