La Policía Municipal de Tránsito le secuestró en la tarde del sábado la camioneta al director del Hospital Iturraspe, Mario Vignolo, tras un control donde se le detectó alcoholemia positiva.

Consultado por El Periódico, el médico confirmó el hecho e informó que sucedió el día sábado alrededor de las 17, cuando volvía de un cumpleaños de un amigo: “Cometí un error, transgredí una norma. No soy un adicto, soy un ser humano que metió la pata pero ya fue y pagué mi multa”.

Vignolo reconoció que conducía con un grado de alcohol no permitido por la ley, aunque aseguró que el control no fue común: “Me dicen que el conductor de una moto alertó a los inspectores de que el auto no circulaba normalmente. Es cierto porque venía con una cubierta rota. Me llama la atención porque en el camino crucé a tres o cuatro motos cuyos conductores circulaban sin casco pero de eso nadie alertó nada”, ironizó el médico.

Luego explicó que uno de los inspectores se precipitó en llamar al camión para secuestrarle su camioneta Ford Eco Sport sin dejarlo llamar a algún conocido para que retire su vehículo, algo que suele ocurrir en este tipo de controles.

“Me fui a mi casa, me cambié y me fui a trabajar para la cena del Hospital (fue el sábado por la noche), no me internaron en ningún lugar como se dijo”, finalizó.