El obispo de San Francisco, Sergio Buenanueva, aseguró hoy que la renuncia del sacerdote Héctor Combina informada días atrás responde a razones del "ámbito privado" sobre la que no podía dar detalles al tratarse de hechos "de índole personal", pero que consideró suficientemente "graves" para motivar el pedido de renuncia tras una investigación llevada a cabo por el Obispado. 

Antes de responder preguntas ante los medios de comunicación, Buenanueva leyó un documento ante las renuncias de los párrocos Raúl Martini (en la Catedral) y Combina, en la parroquia San José Obrero. "Sobre la naturaleza de estas circunstancias y dificultades -distintas en ambas situaciones- no me voy a explayar. Tienen que ver con el ámbito privado. Prevalece el respeto por las personas. Sabemos que hay muchos comentarios, pero no podemos hacernos eco de ellos. Así se lo hemos explicado también a los consejos de pastoral de las parroquias implicadas", explicó.

Cable aclarar que en la renuncia de Martini desde el Obispado no se había informado que obedecía a un pedido de renuncia por parte del obispo, como sí se hizo hoy, sino que se había señalado que respondía a "razones personales" y que Buenanueva "la había aceptado".

Sobre Combina

"Los motivos no los puedo decir porque tiene que ver con la índole privada, estaría éticamente faltando a mi rol y faltándole el respeto a ellos si yo expusiera las circunstancias negativas que nos han llevado a esta decisión. Sería una falta ética grave de mi parte hacerlo público. Muchas veces no se pueden dar los motivos. Cuando hay situaciones personales, hay un límite que no se puede cruzar", señaló el obispo sobre el caso de Héctor Combina y reiteró que debía respetar cuestiones privadas del sacerdote. 

"Hay situaciones graves y son distintas. Obviamente para pedirle la renuncia a un sacerdote hay hechos que son considerados graves que hemos hablado. De parte de ellos, con mucho dolor, ha habido una escucha atenta de lo que el obispo les ha dicho de hacerse cargo", indicó el obispo, pero sin dar más detalles. 

"Son situaciones difíciles y dolorosas para todos, obviamente para los sacerdotes, para el padre Héctor. Pero creo que son necesarias cuando lo amerita la situación para hacer un proceso personal de crecimiento", consideró Buenanueva.

Denuncia judicial

Consultado sobre una presunta denuncia judicial contra Combina, Buenanueva aseguró que sabía que "hay un rumor de una denuncia" pero que desconocía si efectivamente existía. "Si se confirmara, como obispo estaría obligado a investigar canónicamente si esa denuncia es verosímil", aclaró. Sin embargo, indicó que no tenían conocimiento previo de esta supuesta denuncia y que no influyó en el pedido de renuncia realizado al sacerdote.

"En estos días hemos estado hablando con mucha gente de nuestras comunidades, dolidas. Pero además de eso están los comentarios, las habladurías. Todos hemos leído comentarios en Facebook, en las redes, y a veces cruzan los límites. En eso nosotros no nos vamos a meter, debemos respetar la índole privada de la situación", añadió Buenanueva.

En ese sentido, manifestó que habían decidido no prestarse "a estas habladurías que en algunos casos llegan realmente a la calumnia, a inventar cosas para enrostrarle a la persona".

"Comprendemos que hay una situación en las redes que todo tema, no solamente eclesiásticos, se cruzan límites de violencia verbal. Lo soportamos, pero no nos prestamos a eso", dijo.

Razones

Buenanueva evitó confirmar la versión de que la renuncia obedecía a una presunta relación sentimental del párroco Combina, pero sí señaló que no cumplir con el compromiso del celibato asumido por un sacerdote puede ser motivo para una decisión de este tipo por parte de la Iglesia.

"El compromiso del celibato es importante, complejo, difícil de vivir y delicado. Por eso lo primero que hacemos es tratar de ayudar al sacerdote, pero en casos extremos también se pueden tomar decisiones más severas", subrayó.

Sí aclaró que no se trataba de un caso de abuso sexual a menores. "En ese caso concreto la Iglesia es extremadamente severa, porque no es solo una falla del celibato sino un delito. En ese caso tiene que entrar la Justicia y también la Iglesia tiene que hacer su parte", fundamentó.

"Cualquier decisión que toma el obispo lo tiene que hacer pensando en el bien de la comunidad. Y en ese contexto también pensar en el bien de la persona, pero no subordinar el bien del sacerdote al bien de la comunidad", reflexionó Buenanueva.