María Marta Schianni, fiscal federal de Villa María, imputó a su par de San Francisco Luis María Viaut, por presuntos “exacciones ilegales, tráfico de influencias y cohecho activo”. También hizo lo propio con su colaborador Darío Rivarola y otras cuatro personas más.

La causa por la que se los investiga, cabe recordar, nació de la denuncia de un cooperativista de la localidad de El Tío, que aseguró que le pidieron dinero para desvincularlo de una causa judicial que nunca, pudo saber El Periódico, se investigó. Los demás imputados son Gerardo Agustín Panero, Víctor Hugo Brugnoni, Walter Gustavo Fattore y Santiago Badino. Sobre estas cuatro personas, Schianni dijo a El Periódico que habrían colaborado en los hechos imputados, por lo que investigan si obtuvieron su recompensa.

Indagatorias

La fiscal informó que este miércoles los imputados empezarán a ser indagados por el juez Federal de Villa María, Roque Ramón Rebak, quien además ocupa de manera transitoria el cargo de juez federal de San Francisco en lugar de Pablo Montesi.

Según se informó, mañana deberán declarar Rivarola y Panero; el jueves Fattore, Badino y Brugnoni. Viaut lo hará recién el próximo el 28 de diciembre.

De denunciante a querellante

Pablo González, el cooperativista de El Tío que denunció a Viaut y su colaborador, indicó que fue aceptado además como querellante en la causa.

Por otra parte, Juan Alberione, abogado de González, explicó a este medio que habría más personas involucradas con las que se actuó de manera similar con su defendido: “Por ahora está quien denunció originariamente, pero estamos trabajando en lograr que otros testigos declaren. También se trataría de víctimas de estas maniobras por parte de la gente de la fiscalía federal”, indicó.

Alberione confirmó la existencia de una escucha telefónica que se hizo pública en los últimos días, donde se entabla un diálogo entre su defendido y el colaborador de Viaut, donde se presume que habría un intento de este último por negociar.

Al ser consultado sobre si la causa contra su defendido terminó avanzando pese a la negativa de este de aceptar pagar por su desvinculación, Alberione respondió: “Era una causa que ya estaba supuestamente en curso y para no avanzar y no allanarle la cooperativa ni meterlo preso le pedían plata a cambio. Pero nunca tomamos conocimiento si pasó o no algo, pero independientemente que haya habido algo entendía que correspondía denunciar. Y si había algo en contra de ellos (la cooperativa) nos íbamos a defender a través de la ley”.