Preocupan los suicidios jóvenes en San Francisco: la mirada de dos especialistas

Los suicidios son una de las problemáticas a la cual se debería prestar especial atención desde el Estado, las organizaciones y los ciudadanos, pero que lamentablemente pareciera ser todavía un tema tabú, del que pocos hablan y menos se animan a actuar para prevenir.

Pocos días atrás se conoció al menos un caso de una adolescente de 18 años que tomó una drástica decisión, provocando una profunda conmoción en toda la sociedad.

Además, en los últimos meses se registró un incremento de casos o intentos en San Francisco, y particularmente un aumento de estas drásticas decisiones por parte jóvenes y adolescentes.

Tal es así que 2021 fue el segundo año con más suicidios en la última década. Es por esto que resulta fundamental recurrir a la palabra de profesionales para tratar la temática, y exigir al Estado una rápida intervención del flagelo que se profundizó con la pandemia.         

La psiquiatra del Hospital J. B. Iturraspe, Paola Cirelli, confirmó que los casos de suicidio van en aumento año a año, y que “hay mucha preocupación por el suicidio en adolescentes que ha crecido de manera alarmante”.

Por su parte, la psiquiatra, Flavia Berguñán, recomendó hablar del tema, dado que muchas veces el cuadro se logra revertir gracias a poder dialogar con otra persona. "Es importante preguntarle qué siente y buscar ayuda profesional", dijo en El Periódico Radio FM 97.1.

Remarcan la impulsividad de los adolescentes ante las frustraciones: "Los adolescentes que tienen mayor riesgo son los que presentan trastorno del ánimo en combinación con abuso de sustancias y antecedentes de conducta agresiva".

Qué señales debemos tener en cuenta

Sobre las señales que el entorno de una persona que atraviesa por momentos de depresión o angustia debe tener en cuenta, la psiquiatra Paola Cireli, indicó: "Debemos estar atentos a los cambios repentinos de conducta, el aislamiento, la perdida de interés por actividades placenteras, el abandono de rutinas, el insomnio, la falta de apetito, la irritabilidad, la vivencia de tristeza".

“La ideación suicida se presenta en todas las edades y con mayor probabilidad cuando el trastorno depresivo es grave. Sin embargo, los suicidios son inusuales en niños menores de 12 años porque tienen poca capacidad para idear y llevar a cabo un plan suicida, por su inmadurez cognoscitiva”, mencionó en torno a la situación que puede atravesar una persona.

Además, explicó que el suicidio consumado se da cinco veces más en adolescentes varones que mujeres, aunque la tasa de intentos de suicidio es mayor en mujeres.

“La ideación suicida no es un fenómeno estático, sino que puede aparecer y desaparecer en el tiempo. La decisión de llevar a cabo una conducta suicida puede ser impulsiva, sin gran previsión o la culminación de prolongadas planeaciones”, comentó la profesional.

-Cada vez hay más suicidios jóvenes, ¿cuáles son los factores de riesgo?

En cuanto a los factores de riesgo podemos nombrar antecedentes familiares de conductas suicidas, exposición a violencia familiar, impulsividad, abuso de sustancias, haber padecido situaciones de abuso o negligencia. Los trastornos mentales que se observan en estos adolescentes que realizan intentos de suicidios son trastorno depresivo mayor, trastorno bipolar o trastorno psicótico. Los adolescentes que tienen mayor riesgo son los que presentan trastorno del ánimo en combinación con abuso de sustancias y antecedentes de conducta agresiva.

-¿Qué muestran los adolescentes que recurren al consultorio?

Entre los desencadenantes de las conductas suicidas se incluye altos niveles de desesperanza, escasas habilidades para la resolución de problemas y antecedentes de conducta agresiva. Pueden haberse sentido humillados ante un fracaso o haber padecido algún factor estresante reciente, conflictos o discusiones familiares o con la pareja. Perdida de prestigio entre los compañeros, problemas escolares, estar cursando un proceso de duelo, una ruptura amorosa, la separación y el rechazo, el bullyng.

-¿A qué hay que estar atentos?

Debemos estar atentos a los cambios repentinos de conducta, el aislamiento, la perdida de interés por actividades placenteras, el abandono de rutinas, el insomnio, la falta de apetito, la irritabilidad, la vivencia de tristeza. Es necesario preguntar directamente sobre pensamientos suicidas la mayoría de las veces están presentes y no se los menciona. Y consultar inmediatamente a un profesional de la salud mental antes estos signos de alarma.

-¿Qué rol juega el consumo de drogas?

El consumo de drogas es una problemática mayúscula ya que cada vez se inicia a menor edad en el consumo generando deterioro neuronal a muy temprana edad asociado a trastorno graves de conducta con gran monto de impulsividad y auto y heteroagresividad.

-En la ciudad no hay demasiadas organizaciones o medidas desde el municipio para prevenir, ¿Cree que sería necesario tener más actividad al respecto?

Creo que toda la sociedad debe involucrarse en esta problemática. Es fundamental el dialogo familiar, el acompañamiento en el crecimiento de nuestros niños, la contención afectiva y la puesta de límites. Enseñarles a tolerar la frustración y acompañarlos en el aprendizaje. Creo importante la educación desde las Instituciones y abordar la problemática de forma directa.

-Sí, la educación es clave…

 Es importante la educación a la comunidad con charlas educativas y de prevención. El silencio es el mejor aliado para la profundización del problema. Es fundamental la búsqueda de ayuda de manera inmediata si identificamos un adolescente en riesgo. Las escuelas hacen un trabajo de rastreo muy acertado y precoz. Las instituciones de atención son múltiples desde lo público y privado.

Los suicidios, segunda causa de muerte adolescente

Flavia Berguñán, psiquiatra e integrante del servicio de Salud Mental del Hospital Iturraspe de San Francisco, manifestó que los suicidios son la segunda causa de muerte en personas jóvenes, de 15 a 29 años. "No queda exenta ninguna población que estos episodios puedan ocurrir. En realidad hubo un incrementos de intentos de suicidios y de suicidios propiamente dichos, sobre todo con la pandemia", dijo.

En el nosocomio de San Francisco hay mucha demanda para atender a las personas que tienen algún episodio o requieren de una asistencia. “En este momento está la atención por guardia para urgencias, como así también el tratamiento ambulatorio para aquellos que ya se encuentran en tratamiento de psicología y psiquiatría. Próximamente se abrirán las admisiones para los que requieran atención”, sostuvo.

-¿Hay algún motivo de porqué aumentaron los casos?

La pandemia fue un sector de riesgo porque la persona tiende al aislamiento y eso puede potenciar o debutar con los trastornos del ánimo como el trastorno depresivo u otro trastorno de ansiedad. El hecho de no contar con redes o no saber buscar ayuda puede generar que alguien tome esta medida.

Mucho tiene que ver con qué herramientas cuenta cada uno para poder afrontar determinadas situaciones que lo desbordan.

-¿Dónde se puede recurrir?

Tenemos el servicio de salud mental por si es una situación de urgencia. Algo que no se puede esperar a sacar un turno. También llamar al número fijo que es 443790 donde siempre hay un profesional de guardia.

-¿A qué señales tenemos que estar atentos?

Muchas veces la persona puede manifestar no sentirse bien o tener pensamientos de muerte. Esa es la forma más fácil. Pero otra vez podemos notar cambios en el comportamiento de esa persona. El hecho de verlo más retraído, aislarse, angustiado o que no duermen bien, que dejaron de comer. Son algunas de las señales que pueden verse.

-¿Qué tenemos que hacer?

Si la persona pide ayuda hay que escucharlo. Se debe hablar del tema, muchas veces el cuadro se lograr revertir gracias a poder hablar con otra persona. Preguntarle qué siente y buscar ayuda profesional.