José Dávila (34) sufrió un grave accidente en motocicleta a mediados de junio, estuvo al borde de la muerte, sin embargo, “milagrosamente” según su familia y los profesionales que lo asistieron, se recuperó en tiempo récord y regresó a su hogar en San Francisco.

Si bien tiene por delante una larga recuperación y en el medio otra cirugía para colocarle una prótesis en el costado derecho de su cabeza, el hombre se encuentra rodeado de su familia en la vivienda de barrio Ciudad.

Acompañado de su esposa, Gabriela y de su mamá, Marisa, José recibió a El Periódico para contar cómo atraviesa su recuperación: "Estoy feliz de estar en casa. Acá estoy tranquilo, tratándome de cuidar un poco de todo, del frío, de tratar de no salir afuera, de no golpearme y estar acompañado de la familia. Estamos en la casa de mis papás. La semana que viene tengo que ir a Villa María de vuelta para ver cómo seguimos, así que a la espera. Me siento mejor, trato de no esforzarme, de no golpearme ni de enfermarme", contó.

El accidente ocurrió en calle Liniers al 700, en el barrio Sarmiento, donde José fue encontrado tendido en el pavimento tras perder el control de su motocicleta y chocar contra un cesto de residuos. En ese momento, el hombre no tenía casco. Fue ingresado de urgencia en el Hospital J.B. Iturraspe y luego derivado al Hospital Pasteur en Villa María.

José junto a Gabriela.
José junto a Gabriela.

Pasos a seguir

José todavía tiene parte de su rostro afectado y una enorme cicatriz le atraviesa el costado derecho de su cabeza. Su madre, Marisa, explicó: "En estos momentos él no tiene rehabilitación porque tenemos que volver a Villa María el próximo miércoles. El neurocirujano que lo operó nos dijo que tenía que pasar un tiempo para que continúe el proceso de desinflamación y después pasaría nuevamente por otra cirugía para colocarle una prótesis en el lado derecho de su cabeza-placa craneal-. Esto requiere mucho tiempo y rehabilitación. Por el momento solo estuvo asistiendo de un psiquiatra para que vaya asimilando todo lo que vivió".

De todos modos, la mujer aseguró que su recuperación fue asombrosa. "Los médicos y los enfermeros no lo podían creer que en tan pocos días ya pudiera hablar y moverse. Realmente creemos que fue un milagro. José estuvo 17 días en terapia intensiva y un día y medio en cuidados intermedios y una sala común. Así que en 19 días volvió a vivir", dice Marisa. Sin embargo, la mamá sostuvo que José no recuerda nada del accidente, ni del tiempo que estuvo internado.

A pesar de las dificultades, José mantiene una actitud positiva: "No me acuerdo ni cómo fue el accidente, por qué fue, solo que me desperté en una habitación cuando estaba mejor. Estoy agradecido de estar en casa, rodeado con la gente que quiero", admitió.

Ayuda de la comunidad

Además de permanecer con sus padres, José se encuentra con su esposa, Gabriela, con quien tiene una relación de 17 años. Ambos enfrentan desafíos, ya que la joven a sufre de insuficiencia renal crónica y tampoco puede trabajar. 

El hombre se desempeñaba como albañil y tendrá largos meses antes de regresar a sus labores, aunque se mostró ansioso por volver al trabajo. 

Por ello, la familia Dávila está realizando una cadena de solidaridad para apoyarlos durante la recuperación de José. "Seguro vamos a tener un gasto muy importante para esa prótesis, pero creo que con la ayuda de nuestros padres y de la gente vamos a poder conseguirla", comentó Gabriela.

A su turno, José también expresó: "Estoy muy agradecido a los médicos y enfermeros del Hospital Pasteur, fue muy buena atención, y si bien no entré a las redes sociales, sé que mucha gente conocida y que no conozco estuvieron apoyándome, rezando por mí, y la verdad que siempre voy a estar agradecido por todo. Soy un caso que demuestra lo importante de usar el casco, estoy vivo de milagro, no quiero que otros sufran lo que yo pasé, háganlo por sus familias".

La milagrosa recuperación de José Dávila tras su grave accidente: “Les agradezco a todos”