Desde este miércoles 29 de junio, a partir de las 20 comenzará a funcionar el primer refugio municipal para personas en situación de calle en San Francisco, que fue calificado por el intendente Damián Bernarte como “momento trascendental en la vida de nuestra comunidad”.

Funcionará en la ex sede de Cáritas sobre Dante Alighieri al 1590 -esquina Avellaneda-, tendrá capacidad para albergar a 16 individuos y será administrado por personal municipal junto a voluntarios de iglesias católicas y evangélicas de San Francisco.

El secretario de Políticas Sociales Mauricio Vaschetto y a la directora del área, Claudia Lenis, visitaron La Mañana de El Periódico (FM 97.1) para brindar mayores detalles del programa para abordar la problemática de las personas en situación de calle, en forma conjunta con el Consejo Interreligioso Social.

“El programa es una experiencia totalmente novedosa, con la cual tenemos desde el área Social un gran desafío, por ello hemos redactado un reglamento de convivencia intenta que cada persona va a tener que respetar para hacer justamente mejor y llevadera para la convivencia colectiva en el refugio”, apuntó Lenis.  

Vaschetto se refirió a los casos complejos por los que están atravesadas las personas en situación de calle: “No están en la calle solamente por un problema habitacional económico, sino que se encuentran atravesados por múltiples causas como pueden ser adicciones, problemas de salud mental, situaciones de abandono en el ámbito familiar, la vida los ha llevado a cortar vínculos familiares. Vamos a trabajar para tratar de recomponer esos vínculos”.

Relevamiento

Los funcionarios consideraron que personas en situación de calle en la actualidad de San Francisco, “habría aproximadamente unas 12 a 14 personas”.

Además, informaron que en el refugio se encuentran finalizando algunos trabajos de reacondicionamiento y que el lugar cuenta con cuatro dormitorios, sala comedor, baño y cocina.

Según explicaron los funcionarios, cada persona que desee pasar la noche en el lugar deberá acercarse a partir de las 20, hacer su proceso de admisión, cenar, pasar la noche, dormir y a las 8 del día siguiente egresar con todas las pertenencias que hayan llevado.

“En el refugio no se va a cocinar, la provisión de la comida la realizará la Secretaría de Salud a partir de lo que se cocina en las distintas guarderías municipales, con lo cual en el lugar solo se calentará la comida y se servirá”, comentó Vaschetto.

En este sentido, Lenis aclaró que las personas deberán aceptar ciertas reglas de convivencia para transcurrir las noches en el lugar. Además fue tajante al decir que “no se va a permitir que las personas ingrese con alcohol ni estupefacientes, en eso no se negocia”.

Y agregó: “Buscamos ir formando hábitos como una construcción de normas de convivencia, en eso tenemos que ser muy responsables en el armado de este dispositivo y la puesta en marcha”.

CÓMO SERÁ EL REFUGIO

* El personal del refugio recibirá a las personas desde las 20 y podrán permanecer en ese establecimiento hasta las 8 del día siguiente.

* Se les brindará una cama con frazadas, ropa de cama, baño con elementos de higiene personal, una cena y desayuno.

* Trabajo del voluntariado: estará formado por personal municipal e integrantes de las comunidades religiosas. Estos grupos recorrerán en forma diaria por la noche los lugares donde pernoctan personas sin techo para generar un vínculo. A su vez, se realizará un trabajo a mediano y largo plazo, buscando soluciones para que puedan salir de esa situación de vulnerabilidad.

“Una felicidad”

Así recibieron la noticia los integrantes de la Red Solidaria San Francisco. El referente de la ONG local, Marcelo Valverde, le dijo a El Periódico: “Fue una felicidad muy grande conocer esta iniciativa del municipio en conjunto con el Consejo Interreligioso Social y el voluntariado para que los más postergados y vulnerables de la sociedad, los que no tienen casa ni techo y tanto sufren las bajas temperaturas, tengan un lugar de contención”.

Valverde se puso a disposición para trabajar junto al personal voluntario y deseó: “Esperamos que sea sostenido en el tiempo y que no permitamos que alguien que esté pasando mucho frío lo dejemos a la intemperie, lo que tenemos que hacer como sociedad es levantar la mirada y utilizar esta gran herramienta del refugio para acompañarlos”.