La buena calidad educativa del Centro Universitario de Educación Superior (CRES) de San Francisco, así como la fuerte vinculación de esta universidad pública con empresas e instituciones, son dos aspectos que elogian estudiantes de los últimos años de las carreras de Administración y Diseño Industrial. De hecho, muchos de ellos ya se encuentran trabajando y haciendo sus primeras experiencias laborales, ya sea a través de convenios de pasantías o directamente contratados por empresas o entidades.

Manuel Cornalis tiene 25 años y es de Zenón Pereyra, provincia de Santa Fe. Apenas terminó el secundario su idea era estudiar Ciencias Económicas en la Universidad Nacional del Litoral, en la ciudad de Santa Fe. Sin embargo, eligió el CRES San Francisco al ser una ciudad más cercana, más chica y donde pudo encontrar mejores condiciones de vida. Hoy está en cuarto año de la Licenciatura en Administración y desde este año trabaja en una pasantía en el Centro Empresarial de Servicios (CES) gracias a la vinculación previa que tuvo desde la universidad en una materia optativa. 

“Estoy haciendo la pasantía y además tengo varios proyectos personales como emprendedor. A través del Centro Empresarial estoy haciendo relación con todos los miembros de la comisión y eso es espectacular, es una ventana que estoy aprovechando al máximo. Todo es por vinculación con la universidad. También hice un trabajo para otra empresa porque nos recomiendan”, explicó el joven a El Periódico

El estudiante apuntó que las oportunidades están, aunque también depende de cada alumno saber aprovecharlas. “Hay que tener carácter, motivación o actitud para ir a dejar un currículum o presentarse a una entrevista. Lo que veo es que acá las oportunidades te llegan por estar en un entorno mucho más familiar. Hay chances con el Parque Industrial, por la vinculación, por los perfiles que se buscan”, evaluó.

En el mismo sentido se manifestó Florencia Madera (26), que está a punto de terminar la carrera de Diseño Industrial, quien destacó la conexión que otorga el CRES entre estudiantes y empresas, ya que deben realizar prácticas profesionales obligatorias como parte de distintas materias. La joven lo hizo en Codini y desde la firma le ofrecieron luego seguir trabajando a través de una pasantía, por lo que desde mediados de año se encuentra realizando una experiencia laboral en el sector de diseño y desarrollo.

“Una de las cosas positivas que tiene la carrera es la salida laboral, por lo general el contacto es más directo. Nosotros ingresamos en prácticas profesionales en distintas empresas, en mi caso estaban desarrollando un espacio nuevo, buscaban personas y me ofrecieron continuar”, explicó. 

Por otra parte, señaló que todo lo aprendido en el CRES lo puede aplicar en su campo profesional. “Por lo menos en mi caso lo aplico directamente en el lugar donde estoy trabajando. Estoy realizando trabajos que están relacionados con la carrera. Me sirvió mucho porque te ayuda a salir de lo académico y toparte con lo que es la realidad empresarial. Sirve para aprender mucho y a veces es un poco prueba y error”, resumió Madera. 

Una experiencia similar está teniendo Celeste Giorgis (22), que está cursando el tercer año de Administración y a través del Programa Primer Paso consiguió un puesto en una empresa de equipamientos agrícolas de la localidad de La Francia, de donde es oriunda.

“En la Facultad constantemente nos están mandando propuestas de trabajo de las empresas de la zona y cuando entro a ver los requisitos pedían una experiencia como mínimo dos años. Entonces pensé de dónde iba a sacar esa experiencia y con esta posibilidad del PPP es una chance de comenzar y ver si de verdad lo que estoy estudiando me gusta. Tengo la ventaja de poder trabajar en una empresa de mi pueblo y todo lo que me enseñan en la Facultad lo puedo ver en profundidad en la empresa”, contó. 

490 Son los estudiantes actuales que cursan las carreras del CRES.

300 Son los egresados del CRES desde 2013

Cercanía con los alumnos

Asimismo, en los tres casos elogiaron el buen nivel educativo del CRES y la aplicación que tienen en el ámbito laboral los contenidos aprendidos en las distintas materias. Entre otros puntos, resaltaron que al ser una institución más chica que en universidades de grandes ciudades, en el caso de la institución de San Francisco hay una mayor cercanía entre estudiantes y docentes, y también un interés de los docentes para enseñar y mejorar los contenidos de cada materia.  

Antes de llegar al CRES, Florencia Madera hizo una experiencia en Rafaela en la carrera de Arquitectura en una universidad privada. Sin embargo, la experiencia no la convenció y optó por seguir estudiando en San Francisco en la universidad pública. “Acá es un entorno más chico y hay un buen nivel de los profesores, del trabajo que hacen entre las distintas asignaturas para que vos puedas ir aprendiendo todos los contenidos. Eso fue lo que más me gustó y se notó muchísimo la diferencia”, consideró. 

“En cada materia nos preguntan si nos sirvieron los contenidos, qué podemos mejorar. La cercanía y ese trato con el alumno me parece algo bastante positivo. Y el nivel y la vinculación que hay con el entorno empresarial acá es genial y es algo que estamos buscando potenciar aún más”, agregó Cornalis. 

Quedarse en la zona

Esa relación cercana entre la universidad y el mundo laboral hace que también, al menos en los casos entrevistados para esta nota, manifiesten un interés de quedarse a trabajar en San Francisco o en la zona una vez que terminen la carrera. 

“La mayoría de los estudiantes del CRES que conozco ya trabajan antes de recibirse y por lo general son todos de la zona. Al ser una ciudad chica, la implementación de profesionales de otras áreas en las empresas hacen un poco de contagio con otras empresas de implementar cambios”, concluyó Madera.