El Concejo Deliberante repudió por unanimidad lo ocurrido el último fin de semana de noviembre, cuando dos caballos murieron luego de competir en la Copa Challenger, la carrera “cuadrera” más importante del país que esta vez tuvo como escenario el Hipódromo de San Francisco. Además hubo otros dos equinos con complicaciones.

Aunque el oficialismo se sumó al repudio, un sector de la oposición pidió trabajar para que el próximo año surja un proyecto que prohíba la realización de este tipo de competencia en nuestra ciudad.

Gretel Monserrat, presidenta de Fundación Bio Animalis, que se convirtió en querellante en la causa por la muerte de los equinos, agradeció a los ediles por el repudio manifestado y sostuvo que “era necesario”.

TE PUEDE INTERESAR: ¿QUÉ SON LAS CARRERAS CUADRERAS...?

Asimismo, la abogada animalista manifestó que esta acción “es una antesala para que el año que viene, por iniciativa nuestra o de un bloque del Concejo, se presente un proyecto de ordenanza para prohibir las carreras cuadreras en la ciudad”.

En caso de que ello ocurra, sería el primer municipio que las prohibiría en el país. Monserrat también recordó que a nivel provincial hay una ley “muy vieja que las regula” y que de eliminarse esta competencia en San Francisco “sería un primer paso también para derogarla y prohibir este tipo de carreras en Córdoba”.

Causa abierta

Lo ocurrido en el “Oscar C. Boero” llevó a las autoridades del Jockey Club de San Francisco a emitir un comunicado aclarando que habían concesionado el predio para esta carrera “a los efectos de coadyuvar al Turf Nacional”. Informaron también que ante la muerte de los equinos hicieron una denuncia penal.

Paralelamente, la Fundación Bio Animalis será querellante particular con el fin de colaborar con la fiscalía del cuarto turno, que tiene el caso en sus manos.

La investigación continúa abierta, aunque bajo secreto de sumario. Desde la fiscalía que investiga el caso indicaron que están a la espera de respuestas de oficios emitidos y de resultados de análisis científicos.

Un día después de la carrera, la Policía allanó el hipódromo de San Francisco y secuestró elementos utilizados para medicar a los animales, jeringas, agujas, frascos de ampollas, potes de complejos vitamínicos, plásticos de suero, además de solicitar videos de cámaras de seguridad.

Sin embargo, la labor judicial se vio algo entorpecida tras el hallazgo de los equinos fallecidos quemados junto a unas cubiertas dentro de una fosa armada en la zona cercana al predio donde se realizó la competencia, a unos dos kilómetros de las caballerizas.

Monserrat confirmó que ya fueron aceptados como querellantes y que siguen trabajando en la recolección de pruebas. Al ser consultada sobre la aparición de los caballos quemados, respondió: “No es algo normal ni constituye un protocolo, algo que se haga de costumbre”, cuestionó.

Las muertes que se originan en este tipo de carreras concertadas (no pertenecen a las oficiales) despiertan la indignación de quienes sospechan que algunos propietarios dopan a los animales para que tengan un mejor rendimiento aprovechándose de la falta de control y regulación.

Qué son las carreras “cuadreras”, donde murieron dos caballos en el hipódromo de San Francisco