Una importante cadena de cervecerías de Córdoba, desembarcará en los próximos meses en San Francisco. La franquicia se instalará en un histórico edificio de la calle Rivadavia al 550, donde funcionó el antiguo taller de herrería “Piamontés” de Luis Lamberghini, empresa fundada en 1892.

Si bien la obra comenzó hace poco tiempo, El Periódico conoció que se trata de una cadena de bares oriunda de Córdoba, Vidón Bar; que cuenta con sucursales en distintas zonas de la capital provincial como Alta Córdoba, Nueva Córdoba, el Cerro de las Rosas y hasta Villa Allende.

La llegada de esta cadena a San Francisco representa toda una novedad no solo por la situación económica del país sino por el lugar elegido, al tratarse de un edificio histórico que no tuvo utilidad en los últimos años.

Este edificio fue declarado patrimonio de la ciudad, por lo que dicha cervecería deberá conservar los elementos históricos del mismo.

Sobre Vidón Bar

Federico Nocetto, gerente de marca de Vidón Bar, dialogó con nuestro medio sobre las características de la empresa que llegará a San Francisco, el por qué eligieron nuestra ciudad como punto estratégico y la cantidad de personal que podría llegar a contratar.

“Vidón Bar es un comercio que nace finalizando el 2007 en el corazón de Alta Córdoba, un barrio muy tradicional de la capital, con una vida social muy importante. En la actualidad contamos con seis sucursales, cinco en Córdoba capital y una en Villa Allende. Creemos internamente que la plaza de Córdoba capital está colmada, entonces cuando nosotros nos sentamos a definir nuestro plan de expansión y de crecimiento, decidimos empezar por las ciudades importantes del interior de la provincia”, comenzó diciendo.

Según el gerente, evaluaron posibilidades en las ciudades de Río Cuarto, Villa María y San Francisco, que terminará siendo su primera sucursal fuera de Córdoba. Nocetto relató que recorrieron toda la extensión de Libertador Norte y Sur, visitando viviendas y locales amplios para su proyecto de negocios, pero “cuando fuimos a ver el edificio donde nos vamos a instalar -Rivadavia 550- , nos dijimos es acá. Si bien es un edificio que está abandonado hace años, nos generó algo. Porque tiene una fuerte historia, es uno de los edificios más antiguos que están en pie y nos pareció que tenía un valor agregado que la gente vea que se está aprovechando”, destacó y añadió: “Básicamente decimos empezar por ahí nuestro plan de expansión y creemos que en San Francisco es un lugar con una cultura muy fuerte que nos puede acompañar”.

La propuesta de Vidón

En sus sucursales de Córdoba, Vidón Bar se destaca por sus espacios muy bien ambientados y son amplios, y con sectores al aire libre para que el cliente elija dónde pasar su momento.

En este sentido, Nocetto explicó: “Nuestra propuesta tiene que ver con ofrecer un espacio de entretenimiento y esparcimiento para todas las personas que viven en San Francisco. Somos un bar con una política de inclusión muy fuerte, no es un lugar exclusivamente de jóvenes, nos visitan muchísimas familias, entonces lo que ofrecemos son momentos y experiencias agradable para todas las personas. Todo esto apoyados en una decoración de estilo antiguo, combinamos muchas antigüedades en nuestro diseño de interiores por lo que buscamos generar un clima de calidez, que es un es otro de nuestros valores institucionales. Y realizamos eventos prácticamente todos los días, que fomentan la cultura y los artistas de la zona”.

El gerente de marca amplió su idea diciendo: “Buscamos que la gente esté como en el patio de su casa, pero en un bar”.

Edificio histórico

El edificio donde se instalará la cervecería es un inmueble de valor histórico para San Francisco. Allí funcionó el taller de herrería “Piamontés”, fundado en 1892 por Luis Lamberghini.

El taller se especializaba en la construcción y reparación de hornos, calderas y cigüeñales de las máquinas de vapor que se empleaban en las cosechas. En el establecimiento también se llevaron a cabo las primeras soldaduras autógenas que se realizaron en San Francisco.

En la década del ‘30 dejó de funcionar dicha herrería taller y para 1950 se constituyó una sociedad llamada Campa, se trataba de un aserradero de mármoles, que con importantes maquinarias trabajaba con grandes bloques de mármoles extraídos desde las sierras de Córdoba.

Este edificio fue declarado patrimonio de la ciudad, en de octubre de 2011, se inauguró un monolito que representaba alegóricamente a las industrias pioneras de San Francisco -sin embargo, tras una tormenta, la caída de un árbol, lo destruyó y no se recompuso-.

Al respecto, el gerente de marca manifestó: “Sabemos que el edificio es patrimonio de la ciudad, por supuesto, y que eso conlleva a una enorme responsabilidad. Hay cosas que no se pueden y no queremos tocar. Por ejemplo, tiene un techo, dos aguas con vigas de maderas que son hermosas. La fachada nos parece increíble, el estilo de las ventanas y todo ese tipo de cuestiones. Sabemos que es un edificio de más de 100 años, que fue una vieja marmolería tradicional en San Francisco y que puede tener un valor simbólico histórico y cultural, nosotros queremos estar a la altura con algunas reformas que se están haciendo”.

De todos modos, adelantó que se están construyendo escaleras para un entrepiso, sin afectar la parte estructural del edificio. “Creemos, hasta estratégicamente, que, al ser un edificio muy conocido, estar frente de la plaza y a la Catedral, nos parece una gran referencia que nos va a ayudar con el boca en boca”, admitió.

Por último, comentó que ya trabajan con recursos humanos de la firma para pensar y saber cuántas personas contratarán para Vidón Bar en San Francisco, en principio serían unos 20 a 30 puestos de trabajo que se generarían. 

En la actualidad, ya trabajan una docena de obreros de la construcción, además de pintores y otros vinculados a la obra que se lleva adelante.