Luego de que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) resolviera revocarle la prisión domiciliaria a Carlos Fuentes (71), ex director de Cultura de la Municipalidad de San Francisco condenado por abuso sexual en perjuicio de una de sus hijas y otra joven cuando eran menores de edad, habló la familia damnificada.

En la oportunidad Fabián Correa, familiar de las víctimas, habló en El Periódico Radio por FM 97.1 y afirmó estar "sorprendido" y "contento". Contó que recibió la noticia de una de sus hijas "del corazón", que fue notificada por Tribunales de la noticia.

"Cuando se planteó la posibilidad de que Fuentes tuviera el beneficio de la prisión domiciliaria, nosotros nos mostramos en disconformidad. La decisión que se tomó en Tribunales de San Francisco fue otorgarle la prisión domiciliaria por tener 72 años, sin tener en cuenta el poco tiempo que estuvo detenido, que hubo otros casos donde sí mayores de edad estaban detenidos, y que estaba a diez cuadras de casa, que esa es otra cuestión. Fue atroz", recordó.

Seguidamente, criticó las demoras procesales: "Fue declarado culpable en julio del 2019, y después de haber incumplido órdenes de acercamiento, de varios sucesos, recién lo detuvieron en noviembre del 2020. Dejemos de lado que el proceso judicial duró más de cinco años desde que se denunció. Y en agosto del 2021, o sea en menos de un año, tuvo el beneficio de la prisión domiciliaria. Recién hoy, un año después, vuelve a estar donde debe estar".

Correa manifestó, también, que este fallo puede ser esperanzador para víctimas en situaciones similares. "Nos sorprende, uno va siguiendo todos los casos y nunca supe que se haya revocado una prisión domiciliaria a un violador. Siempre fue por incumplirla, o por armarse una red social para tratar de comunicarse con algunas víctimas o amenazarlas, pero este caso nos sorprende. Y da un poco más de alivio, de esperanza", dijo.

A continuación, agregó: "Tenés una sensación de Justicia un poco más llevadera. Y a los otros casos que están esperando justicia, también les da cierta esperanza. Y también a quienes están esperando reformas a nivel penal urgente. No puede ser que hoy un violador, porque tiene 72 años, pueda estar en su casa. Esto es inédito y da un puntapié para que otras víctimas puedan estar pidiendo lo mismo teniendo en cuenta este fallo, para que otras víctimas puedan pedir que los abusadores dejen de gozar de estas prisiones domiciliarias donde no hay control y donde hay inseguridad".