A José Baldisarri le detectaron Insuficiencia Renal Crónica Terminal cuando tenía 4 años. Su vida fue bastante normal durante décadas, sin embargo en los últimos años su estado de salud empeoró y su calidad de vida depende de someterse a diálisis periódicamente mientras se encuentra en una larga lista de espera para recibir un trasplante de riñón. 

A sus 37 años, para fortuna de este vecino de barrio Hipólito Bouchard, sus hermanas Soledad y Pamela no lo pensaron ni un segundo y desde el primer día se pusieron a la orden para realizarse los estudios de compatibilidad con la intención de convertirse en posibles donantes. El amor de hermanos sobrepasó cualquier temor o duda, y hoy el cambio de vida para toda la familia está al llegar. 

El próximo 11 de agosto, Soledad (33) será quien se someta a una cirugía en el Hospital Privado de Córdoba para donarle uno de sus riñones a José. Tranquilamente pudo ser la hermana más chica la heroína, Pamela (27), pero los valores de compatibilidad destinaron a la mayor. 

Amor de familia: Soledad le donará un riñón a su hermano

“A los 4 años me descubrieron la enfermedad por un médico que me dio un medicamento para adulto y me quemó las defensas de los riñones. Gracias a Dios nunca tuve ningún síntoma, nunca me dolió nada, siempre hice mi vida normal pero con mis cuidados. Hasta que en el año 2019 me dijeron que mis riñones no dan para más”, comentó José a El Periódico. Desde allí, con el acompañamiento inconmensurable de sus padres y sus hermanas, comenzó a realizar todos los trámites necesarios para ingresar en la lista de espera de donantes de órganos. 

“Mis riñones están funcionando a menos del 10%. Pero gracias a Dios tengo mis dos hermanas que se ofrecieron a darme el riñón”, agradeció. 

Sole y un destino especial 

Ser donante siempre es un gesto único y especial, en esta ocasión significa darle vida a su propia sangre. Soledad está casada con Juan Pablo, tiene una hermosa hija –Milagros- y al igual que su hermana Pamela, no dudó ni un segundo en realizarse todos los estudios necesarios para determinar la compatibilidad y ser donante de su hermano. 

“Fuimos con mi hermana a hacernos los estudios y resultó que las dos somos compatibles, pero yo comparto más genes de padre y madre, por más que las dos seamos compatibles”, comentó Sole. 

“Estoy ansiosa pero la llevo muy bien. Estamos contentos por él, porque le llegó el momento. Mi familia lo tomó muy bien, mi esposo e hija me apoyan en todo momento y van a estar conmigo hasta el día de la fecha del trasplante”, remarcó. 

“Yo también me ofrecí pero se decidió de este modo, por lo que si el día de mañana pasa algo también estaré yo”, agregó Pamela. 

Agradecido a la sangre 

José no dejó pasar la ocasión para agradecer a sus padres, Nelly y Juan Carlos, y sus hermanas: “No tengo palabras para describir el gesto. Es algo muy importante para ellas y para mí. Ella me está dando un pedazo de su vida, y me toca a mí cuidarla. Después de la operación me tengo que controlar y cuidar más”, dijo. 

“Estoy ansioso, pero contento porque se llegó después de un tiempo largo con lo del Covid-19 y otras cosas que pasaron. Seguramente me va agarrar el miedo cuando entre a la sala del quirófano”, indicó y agregó: “Es engorroso llevar una vida haciéndose diálisis, más que todo en lo laboral porque te dificulta muchísimo”.  

La importancia de donar 

La familia Baldisarri quiere remarcar lo que significa donar órganos para salvar vidas y con este gran acto invitar a otras personas a que lo hagan. 

 “Tratamos de inculcarlo ahora que ya es una ley nacional. Es bueno ayudar a la gente que lo necesita y mucho más en casos donde es la familia”, manifestaron. 

“A la gente le digo que done, que no tenga miedo, que ayuda mucho y es un muy buen gesto que las personas necesiten”, enfatizó José. 

Cabe recordar que el 7 de enero de 2019 se reglamentó la Ley 27.447 de trasplante de órganos, tejidos y células en todo el país.  

También denominada Ley Justina, la norma fortaleció el sistema de procuración, al tiempo que agilizó y simplificó los procesos de donación y trasplante, contribuyendo a alcanzar una marca histórica en materia de donantes y trasplantes para nuestro país. 

La reglamentación reafirma los derechos de los pacientes en lista de espera y trasplantados, describe los servicios de procuración que se crearán en los hospitales y pone de relevancia la importancia de la capacitación. También reafirma que el sistema público de salud cubrirá los gastos a los pacientes que no posean cobertura, y describe cómo realizar la constatación de manifestación hacia la donación de órganos o tejidos. 

Necesidad extrema  

La nueva Ley de Trasplante determina que todos los mayores de 18 años son donantes de órganos salvo que hayan manifestado su voluntad de no serlo.  

Los órganos que se trasplantan en Argentina son: riñón, hígado, corazón, pulmón, páncreas e intestino; y los tejidos como córneas, piel, huesos, válvulas cardíacas y siempre los trasplantes se efectúan a partir de donantes fallecidos. La donación de órganos en vida se realiza pura y exclusivamente en caso de necesidad extrema y debido a la falta de donantes voluntarios post mortem.  

Pedido a la obra social 

Tanto José como sus hermanas remarcaron la situación que atraviesan con la obra social Sancor. Reclaman que la prepaga le autorice la cirugía y todo lo que conlleva en estudios y análisis previos y posteriores.  

“Estamos a pocos días de la fecha de cirugía y todavía no terminan de autorizar la operación. Necesitamos que aceleren los pasos”, manifestaron. 

Al mismo tiempo agradecieron a todos los amigos, vecinos y familias que se sumaron a la venta de alfajores que realizaron durante estos días para colaborar con gastos de estadía y estudios que requieren los dos hermanos. Aquellas personas que deseen colaborar pueden contactarse con algún integrante de la familia Baldisarri a través de las redes sociales o al celular 3564 697533.