Por estos días la provincia de Córdoba registrará temperaturas elevadas. Según datos del Observatorio Meteorológico de Córdoba, tras un “finde” con temperaturas agradables, en el inicio de la semana el calor se hará sentir nuevamente en la ciudad de Córdoba. Desde el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) adelantaron que las temperaturas irán en ascenso hasta superar los 35°C en los próximos días.

El calor extremo genera pérdida de agua y de sales esenciales que afectan el buen funcionamiento del organismo, lo que puede causar un shock térmico, comúnmente denominado golpe de calor.

Como primera consideración ante una ola de calor, es importante prevenir la insolación debido a una exposición prolongada al sol en horarios críticos.

En particular, la población de riesgo ante las altas temperaturas son las mujeres embarazadas, los bebés, los niños y las personas mayores de 65 años.

También deben hacerlo las personas con enfermedades crónicas. Por ejemplo, quienes se atiendan por cuadros respiratorios o cardíacos. Las dolencias más comunes entre la sociedad son la hipertensión arterial, la obesidad y la diabetes.

CONSEJOS PARA PREVENIR LOS EFECTOS NOCIVOS DEL CALOR

  • No exponerse al sol entre las 10 y las 17 horas.
  • Tomar mucho líquido, preferentemente agua.
  • En el caso de los bebés, amamantar con mayor frecuencia. Si tienen más de 6 meses, ofrecerles agua fresca sin esperar que la pidan.
  • Ingerir frutas y verduras, y evitar comidas calóricas y abundantes.
  • Vestir con ropa clara y holgada, y usar gorro.
  • En el caso de los niños, colocarles protector siempre, ya que es la exposición solar en la infancia la que representa más riesgo para el cáncer de piel en el futuro.

CUIDADO DE LA PIEL ANTE UNA OLA DE CALOR

Además de no exponerse en horas pico, los especialistas recomiendan usar protector solar de alto espectro. Para hacerlo de manera correcta, la crema o el spray se debe aplicar de forma uniforme en todo el cuerpo.

Durante la colocación del líquido se deben incluir los empeines, las manos y el cuello. Además, se recomienda repetir la aplicación después de sumergirse al agua o periódicamente luego de colocarlo.

El Ministerio de Salud de la Provincia aconsejó acudir a la consulta médica ante algunos síntomas. Los más frecuentes son la fiebre, la sed intensa, la sensación de calor sofocante, la piel seca, los mareos o el desmayo, el dolor de estómago, la falta de apetito y las náuseas, el dolor de cabeza y la desorientación.

REDUCIR LA ACTIVIDAD FÍSICA DURANTE LA OLA DE CALOR

Es oportuno también reducir la actividad física durante estos días, según lo aconsejado por Salud. Para quienes hacen deporte con asiduidad, se recomendó practicarlos a la mañana temprano o a la tarde, después de las 19 horas.

A su vez, hay que acompañar el desgaste físico con una hidratación permanentemente, en lo posible con bebidas que posean sales.

Por eso, es importante conocer e identificar los síntomas iniciales que pueden ocasionar un golpe de calor. Entre ellos se destacan: agotamiento, debilidad, pérdida de lucidez, confusión, dificultad para hablar, hipotensión, dolor de cabeza, mareos, posibles desmayos, piel caliente y seca (por el cese de la sudoración), náuseas, vómitos, diarreas, pulso acelerado y taquicardia, entre otras.

Ante la presencia de alguna de estas señales del organismo es importante interrumpir la actividad de inmediato.

Acto seguido, se recomienda evitar la exposición al sol, hidratar con agua o bebidas deportivas (reponen sales y minerales), refrescar el cuerpo (cuello, axilas e ingle). Siempre es recomendable llamar rápidamente al servicio de emergencia para una mejor intervención.

PARA TENER EN CUENTA

Si se realiza actividad física al aire libre, hacerlo antes de las 10 o después de las 19. En caso de tener que hacerlo en otro horario, se pueden buscar espacios con sombra y buena circulación de aire.

Acompañar estos métodos preventivos de la siguiente manera:

  • Hidratarse con agua y bebidas deportivas o caseras a base de sales. Antes, durante y después de la realización del ejercicio o deporte.
  • Evitar la exposición al sol. Es importante aplicarse protector solar adecuado para prevenir enfermedades de piel.
  • No comer en exceso, priorizar frutas y verduras.
  • Evitar el consumo de grasas, azúcares, alcohol y cafeína, ya que contribuyen a la deshidratación.
  • Usar vestimenta liviana, aireada y de colores claros.
  • Controlar la cantidad, duración e intensidad de la actividad. Es fundamental no excederse en el esfuerzo.

Los niños menores de 5 años, los adultos mayores y las personas con obesidad o cardiopatías crónicas deben tener un cuidado especial, ya que su capacidad para controlar la temperatura es distinta. Pero también toda la población debe protegerse de la exposición a las elevadas temperaturas.