Tras negarlo toda la semana con distintos argumentos, el Ministerio de Capital Humano anunció anoche que finalmente entregará de forma "inmediata" los millones de kilos de alimentos retenidos y además que abrirá una investigación para identificar a los responsables que "por mal desempeño" no controlaron el "stock y vencimiento de mercadería". 

Por el caso, que había sido revelado por el sitio web El Destape, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, desplazó al secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, Pablo de la Torre, tras tomar conocimiento de irregularidades en el manejo de alimentos guardados en depósitos de la provincia de Buenos Aires y Tucumán y ordenó al Ejército Argentino implementar un plan para su inmediata distribución, según informó el organismo.

El Ministerio informó que “a raíz de una información recibida sobre el estado y fechas de vencimiento de determinados productos adquiridos por el gobierno anterior (los cuales se encuentran en los galpones de Villa Martelli y de Tafi Viejo en la provincia de Tucumán del ex Ministerio de Desarrollo Social), ha llevado a cabo una auditoría y ha decidido limitar las competencias de los funcionarios y empleados responsables que, por mal desempeño de sus tareas, no han realizado un control permanente de stock y de vencimiento de mercadería”.

Asimismo, señaló que “se realizarán las investigaciones administrativas correspondientes, asimismo, se pone en marcha un protocolo para la entrega inmediata de los alimentos de próximo vencimiento por medio del Ejército Argentino para garantizar una logística rápida y eficiente”.

Junto a De la Torre también serán desplazados los funcionarios que lo secundaban y estuvieron involucrados en esta situación.

Polémica

Los alimentos depositados en esos galpones fueron el eje de una controversia con organizaciones sociales que aseguraban que estaban en condiciones de ser repartidos y lo cual no se realizaba por inacción del Gobierno, que finalmente admitió la situación tras varios días y declaraciones en las que negó el problema.

Incluso, sostuvo que eran para emergencias o que la mayoría se trataba solo de yerba mate. Sin embargo, también se supo que no los había distribuido ante pedidos de municipios con situaciones de emergencia.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, había asegurado el pasado lunes que “de los 5 millones de kilos de alimentos, 3.1 millones corresponden a yerba mate que fue comprada por el gobierno anterior”. Y de inmediato enfatizó que “no hay un solo alimento que se vaya a tirar a la basura. No hay un solo alimento que esté bajo nuestra custodia que esté en riesgo de vencerse”.

Acción judicial

El dirigente Juan Grabois, junto a otras organizaciones sociales, había acudido a la Justicia para pedir que se distribuyan los alimentos y el juez Sebastián Casanello le había ordenado al Ministerio de Capital Humano que presente un plan para la entrega de la mercadería acopiada.

El Gobierno apeló la medida e insistió en las últimas horas en que 3 millones de toneladas de las 5 millones retenidas eran paquetes de yerba mate cuya compra estaba siendo auditada.

Finalmente, el Gobierno reconoció que tenía alimentos por vencerse y Pettovello decidió echar al funcionario que supuestamente estaba a cargo de la distribución de esa mercadería.