“Es una cosa increíble ese momento, una vez que nos metemos en esto por algo no queremos salir”, definió Julio Kohan a la revista Vayas Donde Vayas. Kohan es instructor de buceo, a cargo de una escuela que funciona en nuestra ciudad desde el año 2009.

El instructor le dijo a la revista que bucear es como “volar debajo del agua” y no hace falta irse hasta el Caribe para vivir esta experiencia. “La sensación es muy buena. Estudios científicos revelan que comparado a deportes de tierra, el nivel de endorfina (hormonas de bienestar, como se las llama) es más alto en buceo. Es muy agradable lo que sentís y perdura varias horas después de estar en el agua”, explicó.

Kohan es uno de los pioneros en esta actividad que practica hace más de diez años: “Vimos que era algo raro acá y nuestra idea fue ofrecer algo nuevo con la posibilidad de tenerlo cerca. Cuando empecé a bucear me costaba porque no había mucha salida y debía rebuscármela solo. Ahora cambió la situación”.

Habilidades

El curso inicial no es difícil. El interesado debe tener una mínima habilidad en el agua. Se dan clases teóricas con manuales y multimedia. Las clases prácticas se hacen en una pileta. Se exigen cinco clases mínimo. Como corolario, el curso se completa con una salida a aguas abiertas para aplicar lo aprendido.

La escuela genera viajes periódicos. Un destino clave y cercano es Salto, en Uruguay. También en el año hay salidas más grandes. En estos años visitaron Puerto Madryn, Puerto Pirámides, Angra Dos Res (Brasil), entre otros.

Dónde preguntar

La escuela se llama Mediterránea Buceo y posee validación internacional. Con el carnet provisto tras el curso, el alumno podrá bucear en cualquier lugar del mundo. Contacto: 03564 – 15414200. Facebook: Mediterránea Buceo y Julio Kohan Buceo.