Sportivo Belgrano consiguió este lunes un importante triunfo en condición de local ante Independiente de Chivilcoy, en el marco de la 31ª fecha del Federal A. Era un partido clave para la Verde, que tenía el objetivo de escalar en la tabla, pero también reencontrarse con una alegría ante su gente.

En el arco del equipo sanfrancisqueño debutaba Pedro Bravo, de 22 años, quien venía de sumar sus primeros minutos el miércoles pasado por la expulsión de Leonardo Martina. No era sencillo, al golero de Colonia Valtelina le llegó la oportunidad, una chance que venía ganándosela (con creces) desde hace varios meses ya que fue pieza clave en los títulos obtenidos en 2022 y 2023 en Liga Regional.

Bravo tuvo un debut soñado. Fue la gran figura de la noche porque mantuvo en cero su arco y tapó al menos tres remates certeros que eran de ‘medio’ gol para los visitantes, que sobre el final agobiaron el arco de la Verde.

En conferencia de prensa, el ex arquero de Atlético de Rafaela, señaló: “Lo viví con mucha tranquilidad, a pesar de que era mi primer partido porque el otro día sumé solamente dos o tres minutos, me agarra medio desprevenido la expulsión de Leo (Martina) porque ya estaba terminando el partido. Obviamente lo viví con mucha con felicidad de mi parte y por ahí triste por mi compañero”.

“A la tarde estuve un poco ansioso y con ganas de que llegue el partido. Hacía mucho tiempo que venía trabajando para esto, la verdad que estoy muy contento y agradecido con mis compañeros por la confianza que me dieron este estos días, al cuerpo técnico, Darío Capello y también Leo (Martina) que sabiendo que no le iba a tocar en la semana me habló, me me dio consejos y eso también me me dio mayor tranquilidad”, explicó.

Tampoco era sencillo remplazar a Martina. El arquero titular de Sportivo (un hombre de la casa) venía siendo también figura en esta temporada. “No es poca cosa reemplazar a Leo porque está teniendo un año tremendo, estoy también feliz por él. En el partido me mantuve con tranquilidad, pero ya lo último me dije ‘No se nos puede escapar’, no terminaba más, estaba nervioso, trataba de estar atento y que termine el partido, pero una vez que terminó se me vinieron un montón de recuerdos de chico peleándola, tanto con mi familia, con muchas cosas que pasé…”, indicó Bravo.

Bravo también contó que la familia lo vivió también con ansiedad y alegría, apoyando y acompañando en un momento muy importante para él. “Era más la ansiedad de parte de ellos que mía -risas-… por el sacrificio que hicimos durante muchos años es como que llegó una recompensa y bueno, sabía que hoy para mí era el partido más importante que tenía en cuanto a mi carrera, lo traté de vivir con tranquilidad y gracias a Dios salió todo bien”, comentó.