La Asociación El Ceibo cerró un año histórico para el básquet de la institución donde pudo festejar dos títulos y un ascenso, algo nunca antes alcanzado por el equipo de Aristóbulo del Valle y Cabrera.

Cuando comenzó el 2021, Eduardo "Mara" Blengini fue el elegido para esta nueva etapa deportiva. El entrenador que venía de ser campeón provincial trabajó con un grupo de jugadores netamente locales, excepto por Martín Sauco -oriundo de Santiago del Estero- a quien se lo considera ya como un sanfrancisqueño más por su afecto para con la institución.

El retorno a la competencia estuvo marcado por la incertidumbre. El grupo trabajó al 100% a pesar de que el regreso siempre fue una incógnita. Ese trabajo constante fue una de las claves para lo que terminaría sucediendo tanto en el torneo local como en el provincial.

La Flor Nacional cerró un 2021 inolvidable como campeón invicto del Torneo Asociativo y campeón del Torneo Provincial por primera vez en su historia. Fue el resultado de un proceso, no fue una casualidad. Fue orden, trabajo, sentido de pertenencia y una apuesta por el talento local.

“Si hay algo que me pone contento es que son chicos de la ciudad”

Eduardo “Mara” Blengini se refirió al título obtenido y fiel a su estilo, contó que el festejo fue corto y que la mente ya está puesta en seguir creciendo. “El mérito es de los jugadores, uno trata de bajar una línea y me pone contento porque la respetan, pero trato de abstraerme del título personal porque creo que el mérito es 100% de los que la ejecutan”, consideró.

El entrenador señaló que un resultado negativo no iba a cambiar nada el trabajo que se hizo: “Obviamente que es una pelota que entra u otra que sale y te cambia el resultado final, pero estaba convencido y tranquilo que el trabajo que habíamos hecho estaba muy bueno, obviamente decorarlo con un campeonato es mucho mejor”, comentó.

“Últimamente tuve varias charlas con los chicos y un día, créeme que llegué a las lágrimas porque si por algo me ponía contento de lo que se estaba por lograr era porque es un grupo de amigos de gente de la ciudad; por esto de la pandemia algunos no se han podido ir y hemos podido conformar un equipo de chicos de San Francisco, salvo Martín Sauco. Les decía: disfrútenlo, valórenlo”, señaló Blengini.

En cuanto a lo que viene, el entrenador no puede con su genio y con su manera de vivir el básquet: “Ya tengo un papelito con lo que quiero armar porque esto es todo muy rápido y el 3 o 4 de enero seguramente vamos a tener que estar entrenando, hay que cambiar un plantel porque el reglamento así lo establece, por eso también me cuesta muchísimo poder disfrutarlo, pero siento que así es la manera de hacerlo”.

El Ceibo aseguró la continuidad de Agustín Lozano