La startup estadounidense Kitty Hawk no es cualquier empresa: además de abocarse al proyecto de poner en el mercado un auto volador, tiene el apoyo de Larry Page (fundador de Google y hoy CEO de Alphabet, la empresa madre del buscador) y acaba de anunciar que tiene un primer modelo listo par vender a fines de este año.

La noticia surgió del Twitter de Sebastian Thrun, presidente de Kitty Hawk, quien este lunes tuiteó el primer link al sitio oficial de la empresa por primera vez. Allí se puede ver al Kitty Hawk Flyer, primer modelo de la firma.

En verdad, más que un auto eléctrico se parece a una cruza entre jetski y un drone gigante capaz de transportar a un adulto. De todas maneras Cimeron Morrissey, uno de los testers de esta versión, aseguró que la que se ponga a la venta será bastante más práctica que este prototipo.

Según lo que publica el New York Times, el vehículo pesa unos 100 kilogramos y puede volar a una velocidad de hasta 40 kilómetros por hora.

En el sitio de Kitty Hawk, en tanto, se asegura que el aparato es "seguro, probado y legal para ser manejado en Estados Unidos", siempre y cuando se use en "áreas no congestionadas". Aparentemente, no se necesita una licencia especial para volarlo, y "es posible aprender a manejarlo en unas pocas horas".