Cinco policías de la Departamental San Martín fueron detenidos el martes, acusados por la familia de un preso alojado en la alcaidía de Villa María de presuntas vejaciones.  

La medida fue ordenada por la Fiscalía de Instrucción del Tercer Turno, a cargo de René Bosio, quien en el marco de esta investigación dispuso detener al comisario Franco Baravalle Salum, a la oficial principal Dayana Paredes, a la sargento Natalia Fernández y a los agentes Pablo Sánchez y Leonel Moresco.

 Sobre todos ellos pesa la imputación de ser presuntos coautores de los delitos de “Severidades, Vejaciones y Apremios Ilegales”. En tanto, Baravalle, Fernández, Moresco y Sánchez también están imputados de "Falsedad Ideológica".

El caso se inició a raíz de la denuncia formulada hace pocos días por la madre de un detenido, que había sido alojado en la alcaidía ubicada en la esquina de Piedras y avenida Perón, quien aseguró que su hijo habría padecido malos tratos, severidades y vejaciones por parte del personal policial a cargo.

En ese marco, Bosio ordenó una serie de medidas probatorias, tales como secuestro y análisis de cámaras de seguridad (por personal de la D.I.O. de Policía Judicial), secuestro de documentación, Inspección Ocular del lugar y la recepción de varios testimonios (entre ellos las supuestas víctimas), lo que derivó en la imputación y detención de los policías.

Según publica Villa María Ya! serían al menos tres los presos víctimas de dichos delitos cometidos en una comisaría de esa ciudad.

A la vez, el Tribunal de Conducta de las Fuerzas de Seguridad inició una investigación administrativa contra los cinco imputados.