Un insólito episodio ocurrió durante un asalto en un comercio de RosarioLa víctima del robo, Celeste Figueroa, contó a los hombres armados que ingresaron a su local que hacía dos años habían matado a su papá en el mismo lugar. 

Uno de los ladrones, se conmovió, le dijo “lo siento” y la abrazó. Sin embargo eso no fue suficiente para evitar que continuaran con el delito. 

“Cuando comento al choro que habían matado a mi papá hace dos años, me abraza y me dice ‘lo siento mucho’”, contó la joven a Cadena 3.

“El mismo que se llevó mi celular, vino con dos armas dispuestos a llevarse todo y me abrazó”, relató. “Tengo mucha bronca, mucha impotencia. Yo no voy a dejar que me roben, me niego a aceptar”, dijo Celeste.

Durante la huída de los delincuentes, la damnificada pudo manotear del bolsillo de uno de ellos el celular que le estaban quitando y escucharlos decir “vámonos de acá, que ya los quemaron”.

Fuente: Cadena 3