La fiscal federal de San Francisco, María Marta Schianni, explicó que debido a las características geográficas de nuestra zona la problemática de la venta de drogas debe ser tomada desde “un conglomerado” para que exista una investigación eficaz.

“Si nos centramos solo en San Francisco vamos a quedar cortos con el abordaje de la problemática porque la geografía del lugar provoca circulación y una vinculación muy importante entre ambas ciudades”, consideró teniendo en cuenta a San Francisco como Frontera y Josefina.

Schianni, quien subroga a Luis Viaut, dijo estar conforme con la relación mantenida con sus pares provinciales y habló de las dificultades para detectar la existencia de grandes bandas.

“Llegar a las grandes bandas es más complicado, el narcomenudeo es lo más visible y hasta burdo porque uno se para en una vereda y puede advertir maniobras que suelen ser burdas. Pero para llegar al proveedor del proveedor, a los transportistas y quien cocina la droga lleva su tiempo”, expresó la funcionaria judicial.

En este punto, Schianni comparó: “Las comunicaciones están complicadas, antes se hablaba por teléfono y se podía acceder a ellas, ahora se utilizan aplicaciones como WhatsApp, Telegram, Instagram y hasta juegos en red que son de difícil acceso porque son plataformas extranjeras y para requerir esa información te van meses y uno las necesita en el momento”, dijo y afirmó: “Carecemos de recursos para intervenir en esa instancia. Por eso lleva más tiempo establecer cómo será el itinerario, dónde está el líder y ello genera demoras en las investigaciones”.

Una zona para custodiar

La fiscal federal destacó que San Francisco y alrededores es una zona a tener a presente: “No puede ser descuidada porque esté en el límite de una provincia, sino que requiere nuestro trabajo porque evidentemente es la parte limítrofe con estas ciudades santafesinas donde hay una escalada de violencia y situaciones conflictivas que desbordan. Al estar al límite es importante que se trabaje y poner el ojo allí para tratar de controlar”.

Al ser consultada sobre si hay precisión de donde llega la droga a nuestra jurisdicción, indicó: “Es evidente que la droga pasa desde Santa Fe. Las fuerzas de seguridad que manejan la información no establecieron que hubiera bandas de alta peligrosidad en San Francisco”.

Por último, El Periódico consultó a Schianni su opinión respecto a las leyes y si son realmente duras ante este delito: “Las leyes por sí solas no hacen un cambio efectivo respecto al contexto criminal, eso se demostró con reformas penales que endurecieron penas y no va por ahí. Desde mi punto de vista, el foco debe darse en el trabajo del Estado, en la prevención o en las instituciones que pueden cobijar personas vulnerables, adictos o enfermos. La lucha va por la educación”, concluyó.