Un hombre fuertemente armado, de 24 años, ingresó esta mañana en una escuela de Connecticut, al noreste de Estados Unidos, a unos 130 kilómetros de Nueva York, y mató a al menos 27 personas, entre ellas 20 chicos de entre cinco y 12 años, informó la policía local.

El portavoz de la policía estatal, teniente Paul Vance, informó que el atacante ultimó a 20 niños y seis adultos, incluyendo alguien que vivía con él, en la escuela primaria de Sandy Hook en Newton, Estado de de Connecticut, donde viven 27.000 habitantes, situada a 130 kilómetros al noreste de Nueva York.

Según los medios locales, el tirador, identificado como Ryan Lanza, de 24 años, asesinó primero a su padre en su casa y luego a su madre en el centro educativo, donde concurren unos 600 alumnos y también donde trabajaba la mujer en una sala de preescolar. La cadena CNN informó que el director y el psicólogo del colegio también fallecieron en el tiroteo. Luego de la mantanza, se suicidó.

Sobre la base de lo que aparece en su perfil de la red social Facebook, Lanza vivía en Hoboken, Nueva Jersey y junto a su cuerpo fueron halladas cuatro armas, entre ellas una Glock y una Sig Sauer. En su automóvil encontraron un rifle Bushmaster.


Relatos tétricos

"La policía nos dijo que nos abrazáramos unos a otros, nos agarráramos de la mano y cerráramos los ojos. Solo los abrimos al salir del colegio", explicó, Vanessa Bajraliu, una nena de nueve años al diario local Hartford Courant, minutos después del tiroteo.

Stephen Delgiadice, padre de uno de los alumnos, informó que su hija de ochos años escuchó dos estallidos fuertes y los profesores le ordenaron meterse a una esquina. "Mi hija está bien. Esto es alarmante, especialmente en Newtown, que siempre se creía era el lugar más seguro de Estados Unidos'', dijo.

Brendan Murray, también de nueve años, relató que estaba con sus compañeros en el gimnasio de la escuela cuando escucharon "un montón de tiros" y los profesores les ordenaron que se escondieran en un armario, donde permanecieron ocultos durante 15 minutos.

Richard Wilford, un padre de un alumno de la escuela, se preguntaba desesperado: "¿Qué piensa un padre dirigiéndose a una escuela donde hay un tiroteo? Es el momento más aterrador de la vida de un padre... No tienes ni idea".


Obama entre lágrimas

Muy conmovido por la masacre con 27 muertos ocurrida esta mañana en una escuela primaria de Newtown, en Connecticut, el presidente de EE.UU. Barack Obama, habló a su país y se mostró apenado y dolorido durante su breve discurso.

"Eran chicos entre cinco y diez años de edad. Tenían toda la vida por delante", afirmó el mandatario estadounidense al tiempo en que realizaba pausas y se secaba las lágrimas que le corrían por la mejilla.

"No reaccioné como presidente, sino como padre. Dios bendiga a la memoria de las víctimas. Nuestros corazones están con ellos", afirmó hoy el mandatario, que decretó cuatro días de luto a nivel nacional.

"La policía nos dijo que nos abrazáramos unos a otros, nos agarráramos de la mano y cerráramos los ojos. Solo los abrimos al salir del colegio", explicó, Vanessa Bajraliu, una nena de nueve años al diario local Hartford Courant, minutos después del tiroteo.

Stephen Delgiadice, padre de uno de los alumnos, informó que su hija de ochos años escuchó dos estallidos fuertes y los profesores le ordenaron meterse a una esquina. "Mi hija está bien. Esto es alarmante, especialmente en Newtown, que siempre se creía era el lugar más seguro de Estados Unidos'', dijo.

Brendan Murray, también de nueve años, relató que estaba con sus compañeros en el gimnasio de la escuela cuando escucharon "un montón de tiros" y los profesores les ordenaron que se escondieran en un armario, donde permanecieron ocultos durante 15 minutos.

Richard Wilford, un padre de un alumno de la escuela, se preguntaba desesperado: "¿Qué piensa un padre dirigiéndose a una escuela donde hay un tiroteo? Es el momento más aterrador de la vida de un padre... No tienes ni idea".