Hermes Cachiarelli, de 80 años y su hijo Rodolfo, de 42, pasaron un pésimo momento en la madrugada del viernes, cuando aproximadamente a las 4 horas dos ladrones entraron a su domicilio de calle Belisario Roldán al 300 y los asaltaron.

Lo hicieron luego de forzar el portón corredizo de su cochera. Una vez adentro, los ocupantes de la casa fueron maniatados por los malvivientes, quienes además le taparon la cabeza con bolsas para que no los observen mientras efectuaban el robo.