El ladrón tenía el rostro cubierto. Estaba armado. Y cerca de las 20 horas de ayer ingresó al local mayorista de calle Brigadier López al 353. Amenazó a Eduardo Lucero y a su esposa, quienes estaban a punto de cerrar.

Sin amedrentarse, la pareja se negó a entregar el dinero que intentaba llevarse el delincuente y decidieron esconderse en el fondo del local.

Pero no quedó allí. Lucero le arrojó una botella de Coca Cola de 1 litro, que se estrelló contra la vidriera del frente, y posteriormente con un caño de hierro, el cual golpeó al ladrón que decidió huir sin nada.

Tras la denuncia efectuada, la Policía logró identificar al delincuente y a quien lo esperaba fuera del local.