Un equipo médico que trasladaba un corazón para ser trasplantado debió tomar un remis para recorrer el último tramo hasta el centro de salud donde se iba a realizar la intervención, ya que la ambulancia en que viajaba chocó y se acababa el tiempo para poder utilizar el órgano.

El choque se produjo cuando la ambulancia circulaba por el centro, en la esquina de avenida Colón y Sucre, donde impactó contra una motocicleta, en la que circulaba un matrimonio y su hija de seis años.

Al producirse el choque, que dejó como saldo tres heridos, los médicos, que habían partido de Buenos Aires, decidieron dividirse y, mientras unos quedaron asistiendo a los lesionados, los restantes se encargaron de conseguir un remis y partir rápidamente hacia el centro de salud donde era esperado el corazón.

El insólito hecho se produjo alrededor de las 16.30 de ayer cuando los médicos iban a bordo de una ambulancia de la empresa Ecco que había salido de Buenos Aires rumbo al Hospital Privado de la ciudad de Córdoba.

El director del Privado, Ricardo Pieckenstainer, informó esta mañana a radio Cadena 3 que en el accidente, "por fortuna, tanto el personal médico como el órgano no sufrieron lesiones y se pudo terminar el proceso". Los médicos subieron a un remis que pasaba por la zona llevando la heladera ya sobre el tiempo límite para poder practicar la intervención.

"El trasplante terminó cerca de las 20" de ayer, dijo Pieckenstainer, y aseguró que unas horas después de la cirugía se comenzaron "a ver los primeros cambios de la evolución del paciente".

"Uno de los ocupantes de la moto tenía una lesión importante. Se trató de la pequeña, que fue trasladada hacia el Hospital de Niños con una fractura", precisó el director del Hospital Privado.