Román, con solo 45 días de vida, ingresó en la madrugada del domingo con su boquita llena de sangre y hematomas en su cabecita en grave estado al Hospital Materno Provincial Dr. Raúl Felipe Lucini, acompañado de su mamá, su abuela y su papá.

Los médicos lo asistieron y no tardaron en reconocer a Román. Era el mismo bebé que nació el 6 de mayo pasado en ese hospital y que durante un mes estuvo internado en la neo.

Desde el domingo en que le dieron el alta solo pasaron nueve días y su estado claramente mostraba signos de violencia. Conectado a un respirador y farmacológicamente sedado estuvo cinco días.

Las autoridades hicieron la denuncia y el papá quedó detenido esa misma tarde.

“El bebé está muy grave, con edema cerebral y algunas otras lesiones. Por suerte, lleva 24 horas sin respirador”, dijo el jefe del departamento de neonatología, Héctor Ferreyra.

Fuente: ElDoce.tv