El sábado 17 de enero la Policía lo detuvo en el camino de las Altas Cumbres mientras intentaba huir hacia Mina Clavero. Se lo acusa de haber degollado a Felipe Salinas (70), quien vivía en una casa cercana a la ruta 14. Juárez entró en la vivienda del jubilado y lo mató. Le cortó la cabeza, se llevó algo de dinero y ropas y salió huyendo con dirección hacia Copina.

El día anterior, el viernes 16, había aparecido el cuerpo de Graciela Miño (64), en el balneario de Sol y Río de Villa Carlos Paz. Había sido asesinada con golpes en la cabeza.

Para la Justicia, Juárez, oriundo de Frontera y con antecedentes penales, fue el autor de los dos asesinatos. Sin embargo, según informa La Voz del Interior se declaró su inimputabilidad.

Patología

Juárez padece una multipatología psiquiátrica que le impide tener conciencia de sus actos. Según trascendió, fue trasladado al pabellón psiquiátrico de la cárcel de Cruz del Eje, donde permanece internado.

Cabe recordar, que fuentes de la causa, que fue instruida por el fiscal del Primer Turno de Villa Carlos Paz, Gustavo Marchetti, aseguraron que desde que fue detenido y alojado en la Alcaidía de la Comisaría de esa ciudad, Juárez exteriorizó su estado pidiendo que lo mantengan detenido porque “tenía el diablo en el cuerpo” y le pedía que matara.