Un abogado fue asesinado de un tiro cuando intentó evitar que asaltantes secuestraran a su esposa en el momento en el que llegaba a su casa, en el distrito bonarense de Quilmes.

El violento hecho se produjo anoche en la intersección de La Rioja y Sáenz Peña, en Quilmes Oeste, y tuvo como víctima fatal al abogado Carlos Marcelo Fernández Durañona, de 43 años.

En tanto, la esposa del letrado, Verónica Wolgeschaffen, de 42 años, fue liberada sana y salva en la localidad de Bernal, tras el pago de un rescate.

Todo ocurrió cerca de las 21 cuando la mujer llegaba al domicilio a bordo de automóvil Chevrolet Spark.

Según contó el jefe departamental de Quilmes, el comisario Fernando Grasso, "en ese momento se 'descolgaron' dos hombres que llegaron en un Volkswagen Fox y la asaltaron".

Uno de los delincuentes obligó a la mujer a subir al Fox, mientras que otro se trabó en lucha con el esposo, que esperaba a su esposa con el portón semiabierto e intervino para tratar de evitar el secuestro.

El comisario indicó que la mujer escuchó el disparo cuando ya se era llevada secuestrada en el auto, pero no supo el destino fatal de su esposo hasta que fue liberada horas más tarde.

Fernández Durañona murió en el acto tras recibir un disparo en el rostro, mientras que el asesino escapó del lugar a bordo del auto de la familia.

"Gracias a Dios los dos hijos adolescentes de la pareja no presenciaron el hecho", sostuvo Grasso.

Poco después, los asaltantes se comunicaron con un familiar y acordaron liberar a la mujer, tras el pago de un rescate compuesto por dinero en efectivo y electrodomésticos.

Tras la liberación de la mujer, los delincuentes que participaron del crimen permanecían prófugos y eran intensamente buscados por la Policía.

Según reveló el jefe policial, los dos autos y las armas utilizadas por los asaltantes fueron secuestradas.

Grasso opinó que el hecho se produjo "al voleo" y que los asaltantes actuaron en función a la oportunidad de ver "un auto que se detiene con una mujer a bordo".