Este lunes se conocieron detalles de la violencia que ejercía José Silverio Roldán (57) sobre Laura Palacios, la mujer de 50 años que terminó degollada en manos de quien era su pareja y apareció el último sábado muerta a la vera de la ruta 17, en la localidad de Balnearia.

“La mató como a un perro”. La dura frase salió de la boca de Melisa, una de las hijas de la víctima, quien junto a su hermana Micaela y Olga, tía de ellas y hermana de Palacios, dialogaron con el canal televisivo C5N.

"La Justicia siempre estuvo del lado del hombre. Él (por Roldán) tenía restricciones, le habían sacado un arma de fuego. Mi mamá se fue a vivir a otro lado porque él la amenazaba", relató la joven, confirmando que el femicida tenía en su contra denuncias por violencia, acoso y hostigamiento.

El lugar donde apareció asesinada Laura.
El lugar donde apareció asesinada Laura.

“Ella sufría de violencia y por eso se fue a vivir con mi hermana a Brinkmann, por las amenazas. Pero por temas de plata se tuvo que venir”, agregó Melisa.

Además, las hijas de la víctima revelaron que Roldán se llevó a Laura el sábado con la excusa de acompañarla a hacer unas compras al supermercado.

Según Olga, su hermana buscaba excusas para no ver a esta persona: “No llegaron a convivir, pero él la molestaba todo el tiempo, pese a que vivía en el campo iba todos los días, era un tipo muy obsesivo”, describió.

El cuerpo de Laura, cabe recordar, fue encontrado este sábado junto con un cuchillo y la moto de Roldán. El domingo, a 30 kilómetros de ese lugar, en cercanías a Altos de Chipión, la Policía de Córdoba halló al sospechoso muerto de un disparo en un descampado.

Micaela, su otra hija, reconoció haber acompañado a su madre a realizar las denuncias: “Nosotras dos juntas denunciamos hace tres años y pedimos una restricción que después él no cumplía. Él siempre vivió en el campo, pero venía acá todos los días. Era un tipo muy posesivo. A ella le dijeron que la iban a meter presa también, como a él, porque no cumplían las restricciones. Ella se asustó porque tiene una nena de 10 y no quería que le pase nada, por eso no nos contó luego que la seguía golpeando”.

Para las hijas de Palacios, la Justicia “no hizo nada para evitar que esto pase”.

“Ella se fue el sábado a hacer unas compras, dejó a mi hermanita de 10 años y le dijo que ya volvía, pero todavía la está esperando”, dijo entre llantos Melisa.