n del misterio. Autoridades niponas revelaron qué era la extraña bola metálica, de un metro y medio de diámetro, que fue encontrada días atrás en una playa de Japón y que desconcertó en un primer momento a los funcionarios.

El objeto fue divisado por una mujer que alertó a las autoridades de su presencia.

“Está hueca”, señalaron especialistas que la examinaron y que temieron que el artefacto pudiera explotar. Pero ya se sabe: no era una bomba.

BOLA GIGANTE EN JAPÓN: QUÉ ERA

En concreto, este objeto fue descubierto en la playa de Enshuhama, situada al norte de Hamamatsu.

Las autoridades competentes se apresuaron para colocar un cordón que impedía el paso e investigar qué era esa bola metálica que había aparecido de la nada en la playa japonesa. Las teorías y las sospechas eran variadas.

¿QUÉ ES LA BOLA METÁLICA ENCONTRADA EN JAPÓN?

Ahora ya se ha develado el misterio y se sabe con certeza qué es exactamente la bola de metal de un metro y medio de diámetro. Las primeras conclusiones de las investigacioens fueron claras, no era una bomba. La explicación fue que el interior de la bola estaba hueca.

En segundo lugar, el objeto venía del mar, ya que tenía percebes pegados a la superficie de la bola. Con la tensión y los rumores creciendo y circulando por los medios de comunicación locales, finalmente las autoridades develaron de qué se trataba.

A través de unas declaraciones hechas al New York Times, el jefe de la Oficina de Gestión de Costas y Ríos de la prefectura de Hamamatsu, Hiroyuki Yagi, aseguró que este objeto era una boya perdida. Además, el artefacto iba a ser “convertida en basura” dada su inutilidad.

LA BOLA GIGANTE DE METAL EN JAPÓN

Hasta que no se supo de qué se trataba exactamente, se dijo que esta bola metálica era una mina submarina, porque tenía dos puntos de enganche, uno en cada polo.

Otros rumores apuntaron a un globo espía, debido a la tensión creciente entre Estados Unidos y China por estos objetos. Sin embargo, y al no tener nada en su interior, se trata de una boya que no acarrea ningún peligro ni amenaza. (Fuente: La Voz del Interior)