Más de una decena de presidentes visitaron San Francisco a lo largo de su historia. La mayoría de ellos vino solo para realizar actos de presencia, mientras que uno llegó para inaugurar una obra pública: la habilitación del servicio de agua corriente.

Este fue Juan Domingo Perón, quien ya había estado en nuestra ciudad en 1947, pero que al año siguiente, un 24 de febrero de 1948 volvió con su esposa Eva Duarte para participar del acto donde se habilitó el acueducto Villa María – San Francisco.

El recibimiento que les tributó la multitud, superior a las 10 mil personas, fue literalmente entusiasta, recuerdan historiadores locales. Todo el ámbito de la vieja estación de trenes y sus alrededores quedó inmerso en un grito unánime y apasionado: “Perón, Perón, qué grande sos…”.

Guzmán, Perón y Aristóbulo Vargas Belmonte, interventor en Córdoba
Guzmán, Perón y Aristóbulo Vargas Belmonte, interventor en Córdoba

El general fue presidente constitucional desde el 4 de junio de 1946 hasta el 4 de junio de 1952, y luego reelecto por un nuevo período permaneciendo en el poder hasta el 20 de septiembre de 1955, cuando fue derrocado por un golpe militar.

Su visita se destaca de las de demás mandatarios al ser el único que pernoctó en la ciudad, precisamente en el barrio de oficiales de la Fábrica Militar.

Testigo de sus horas en la ciudad

El fotógrafo Miguel Crisanto Molina (falleció a los 91 años en 2016) fue quien retrató durante toda la estadía del presidente y su esposa sus actos, transformándose en un testigo en primera persona de aquel acontecimiento histórico.

Molina era el fotógrafo oficial de la Fábrica Militar, radical y el afiliado más antiguo que tenía el centenario partido en San Francisco. Vaya paradoja.

Molina muestra un álbum de fotos de Perón en San Francisco.
Molina muestra un álbum de fotos de Perón en San Francisco.

En una entrevista con El Periódico, recordó la jornada de la siguiente manera: “Perón llegó con Eva a la Fábrica más o menos a las cinco de la tarde, por la ruta 19 con un coche motor que dejó en la calle y había un gentío impresionante, por todo lo que significaba en aquel momento. Vinieron a la Fábrica nomás, recibieron gente. Yo tenía por orden de director la exclusividad de toda la visita de Perón, era el único fotógrafo que había, tenía una camioneta a mi disposición para moverme”.

- ¿Cómo eran ellos? ¿Cómo lo trataron a usted y a los demás?

- Perón era un tipo extraordinario, no dialogué directamente con él, pero estuve permanentemente cerca porque sacaba las fotos, entonces cuando pasaba alguno le sacaba y todo así hasta que a la tardecita salimos para el centro para la inauguración de la obra del agua corriente. Cuando salimos de la fábrica era impresionante la cantidad de gente, que gritaba ¡Perón! ¡Perón!

- ¿Y Eva?

- Ella hablaba mucho, manejaba la situación. Él asentía algunas cosas, pero ella hablaba siempre.

La primera visita

Perón viajó por primera vez a San Francisco en 1947. La visita consistió en un breve paso por la estación ferroviaria donde tomó contacto con la población y sus autoridades.