Los accidentes, roturas de vehículos y situaciones de peligro por el mal estado de la ruta nacional 158 fueron una constante en los últimos años en el tramo entre San Francisco y Las Varillas, donde se concentraban los segmentos peor conservados de esta ruta y que todavía tiene varios kilómetros con varios pozos o apenas unos parches.

Y si bien la repavimentación en los 34 kilómetros desde nuestra ciudad a Colonia Prosperidad trajo una mejora significativa, la reciente construcción de canteros divisorios o isletas para mejorar los accesos a las localidades de Colonia Prosperidad, Quebracho Herrado y al Parque Industrial de San Francisco, ocasionaron un nuevo problema, ya que la nula iluminación y escasa señalización los convirtieron en obstáculos que los usuarios encuentran en medio de la ruta. Y las consecuencias se pagan con más accidentes, como el ocurrido la semana pasada en San Francisco que dejó a un hombre con gravísimas heridas

Estas islas fueron terminadas en los últimos meses y su construcción estuvo a cargo de la empresa Luciano S.A., encargada de las obras de repavimentación recientemente concluidas. Las críticas de usuarios de la ruta 158 fueron coincidentes en redes sociales: representan un grave peligro, y una simple inspección en esos lugares lo corrobora. Ante la consulta de El Periódico, desde la firma declinaron dar una respuesta.

Las obras deben ser supervisadas por la Dirección Nacional de Vialidad, que hasta el momento tampoco se pronunció al respecto. 

Este medio pudo saber que desde Vialidad se ordenó un relevamiento urgente del estado de esas peligrosas construcciones, por lo que resta conocer cuál será el plan de acción en adelante.

Ruta 158: grave peligro por los canteros en ingresos a localidades
Las huellas de frenadas o pasos por encima son evidentes en Colonia Prosperidad.

Ni luz ni señal

Uno de los casos preocupantes es el cantero levantado sobre la ruta en el ingreso a Colonia Prosperidad, que de no remediarse de manera urgente podría ocasionar otro accidente que lamentar. El principal problema está para quienes circulan en dirección a San Francisco. La iluminación no es mala, sino inexistente, como pasa también en las otras dos construcciones ya mencionadas. En este caso, del cartel colocado inicialmente en esa isla que señalizaba el desvío para quienes viajan en esa dirección solo queda apenas el hueco en su base, presuntamente víctima de un atropello. Antes, ninguna demarcación sobre la ruta o señalización en la banquina lo anuncia.

Si bien se debe reducir la velocidad al transitar por una zona urbana, al no haber iluminación ni señal alguna que advierta de la isleta, quienes circulan por la ruta, sobre todo de noche, se encuentran frontalmente con el obstáculo sobre su mismo carril ya encima, por lo que deben maniobrar en pocos metros o bien pasarla por encima. Las huellas marcadas sobre la ruta de frenadas y desvío son visibles a simple vista. También las de vehículos que pasan por encima. 

Ruta 158: grave peligro por los canteros en ingresos a localidades
En Quebracho Herrado todavía está el cartel, pero no hay luz ni advertencia.

En Quebracho y San Francisco, otro grave riesgo

Similar o mayor es el peligro en Quebracho Herrado, ya que en este caso aún se mantiene el cartel que indica el desvío de carril, ya sobre el cantero. Así, quienes circulan se encuentran frontalmente no solo con el riesgo que representa esta isleta de cemento sino además con el cartel. 

Antes de esa isla, tampoco hay demarcación alguna en la ruta que advierta el desvío con líneas amarillas o tachas reflectantes. Tampoco hay alumbrado en el sector, por lo que de noche se convierte en otro peligro "plantado" que deben sortear quienes transitan por esta ruta. Principalmente también en dirección a San Francisco, ya que el cantero se encuentra sobre el mismo carril de circulación.

No muy diferente es el caso de la isleta frente al acceso al Parque Industrial de San Francisco, colocada hace apenas unos meses. El alumbrado público del sector solo alcanza a la construcción del lado sur, por lo que en dirección a San Francisco se trata de otro riesgo que no tiene tampoco demarcación alguna que lo advierta, si bien se trata de un tramo urbano en el que debe reducirse la velocidad. En este caso, se mantiene el cartel que señala el desvío obligatorio de carril y en dirección a San Francisco el cantero se ubica en el carril contrario, sobre la izquierda, por lo que el riesgo de impacto frontal es menor.

Este cantero fue señalado como el elemento determinante que causó un gravísimo accidente el pasado viernes 18 de junio en ese lugar, cuando el conductor de una camioneta que se dirigía en dirección a San Francisco para tomar la ruta nacional 19 maniobró bruscamente para evitar el impacto contra la isleta, perdió el control del vehículo y tumbó sobre la banquina. Se trata de un hombre de 56 años vecino de la localidad correntina de Ituzaingó, quien sufrió heridas muy graves y aún se encuentra internado en estado delicado. “No se ve nada, es muy peligroso”, resumió su hijo, quien lo acompañaba en el vehículo.

Ruta 158: grave peligro por los canteros en ingresos a localidades
En Las Varillas, la construcción para un desvío es distinta y más segura. Y hay iluminación

Distinta construcción

Solo para comparar con una construcción similar en esta misma ruta nacional, como la realizada a fines del año anterior en el ingreso al aeropuerto de Villa María, se pueden observar diferencias notorias. En el caso del aeropuerto villamariense existe una demarcación con líneas amarillas horizontales antes del comienzo de la isleta, reductores de velocidad sobre la carpeta asfáltica y ensanchamiento de la misma, por lo que quienes circulan no se encuentran de golpe con un bloque de cemento en su carril.

Y lo mismo ocurre en la obra de desvío en el acceso sur a Las Varillas, inaugurado también a fines del año pasado, que incluye una demarcación horizontal y ensanchamiento del carril.

La colocación de estas isletas divisorias no suponen una gran obra de ingeniería y su utilización para ordenar los accesos es frecuente en todo el mundo, por lo que contar con un modelo de construcción que sea seguro para las miles de personas que circulan a diario por este importante corredor vial no debería reunir mayores dificultades. Los responsables deberán responder qué patrones se siguieron o se omitieron en estas obras, y tomar las medidas de seguridad pertinentes.

De no hacerlo, tarde o temprano se escribirá sobre otro accidente. 

Ruta 158: grave peligro por los canteros en ingresos a localidades
El alumbrado público comienza poco después del lugar del accidente en el Parque Industrial.