Alrededor de 500 jóvenes de San Francisco que recibieron en el último tiempo instrucción teórica sobre seguridad vial, rindieron este martes el examen final que los habilitará a hacer la parte práctica solamente en busca de su primera licencia de conducir. Además, haber participado de la capacitación les exime del pago de las tasas que implica este trámite.

El programa municipal “Hacia Mi Primera Licencia de Conducir” que se desarrolla por segundo año consecutivo cuenta con la coordinación del especialista en materia de seguridad vial, Horacio Botta Bernaus, quien explicó se buscó trabajar de manera amigable con los jóvenes que participaron del curso.

“Siempre usamos el examen en papel, ahora usamos una plataforma con una base importante de preguntas y respuestas aleatorias a través del teléfono celular donde aparecen preguntas y opciones para responder en tiempo real”, explicó el especialista y agregó: “Los resultados son muy parecidos a los que teníamos. Lo que cambió es la garantía de que cada uno hizo su examen, sin posibilidad de consulta al compañero”.

Botta Bernaus señaló que las nuevas generaciones demandan formas “ilustrativas y ágiles” para resolver problemas: “Lo que nos pide la sociedad hoy es que les respondan sus inquietudes, cómo se resuelven los problemas que tiene la conducción del vehículo y que se aprenden con la ley, pero simplificada. Algo importante es que los profesores se comprometieron mucho en las escuelas y nos plantearon que les gustaba la posibilidad de resolver problemas concretos. Ese es el camino que muestra la capacitación”.

Luego, reconoció que se lleva de esta capacitación “20 o 30 palabras que los chicos no conocen”, entre las que mencionó: habitáculo, rodado, vía transversal, carril adyacente, prioridad de paso, entre otras. “Estos conceptos hoy se toman a lo largo y ancho del país y nadie los está esclareciendo. La formación vial no se presume, sino hay que trabajarla”, consideró y advirtió: “Los jóvenes son muy directos, plantean por qué y para qué tienen que hacer tal cosa y eso es saludable”.

Un programa solicitado por las escuelas 

Por su parte, el intendente Damián Bernarte indicó que transformar conductas “no es algo que se ven los resultados de manera inmediata, pero no se puede discutir la necesidad de hacerlo y sostenerlo en el tiempo”.

El intendente manifestó que observan demanda por parte de las escuelas de que este programa tenga continuidad en el tiempo: “La educación es un pilar básico al momento de modificar conductas, por eso la idea es sostener estos programas. Necesitamos en una ciudad con un promedio de tres vehículos por domicilio (entre autos y motos) generar conductas saludables en la conducción porque la accidentología vial es uno de los problemas más graves que tenemos”, cerró.