Esta semana, agencias de viaje realizaron una caravana por las calles de la ciudad, para pedir la Ley de Emergencia Turística en el marco del contexto que se vive en el mundo ante el avance del coronavirus, lo que les impide trabajar con normalidad. 

Diferentes empresas de turismo locales aseguran que el panorama es de incertidumbre pero que lo afrontan con optimismo. 

En ese sentido Cristian Levrino, de Setil Viajes y Turismo, afirmó: "Nos sumamos a la marcha nacional de pedido de la Ley de Emergencia Turística, pedimos todas las herramientas posibles que tiene cada ente del Estado para que nos puedan acompañar en esta etapa de facturación cero que empezó en marzo, abril".

A pesar de ello, Levrino llevó tranquilidad a sus clientes. "La idea es transmitirle a todos los pasajeros y clientes que estamos muy presentes, accionando para que el Estado a través de sus posibilidades nos pueda acompañar en este tránsito tan duro".

Consultado acerca de cómo ve los próximos meses, respondió: "Futurología no podemos hacer, pero sí podemos posicionarnos en algún lugar, nosotros, en la vereda del positivismo. Estamos trabando y preparándonos para que el día en que podamos, salgamos mejor que nunca".

Respecto a las actividades que vienen realizando en estos meses, Levrino indicó que tienen que ver, mayormente, con la realización de capacitaciones, tanto internas como capacitaciones externas que brindan para agencias amigas sobre sus productos. "Es un tiempo de preparación", definió.

"La gente lo ha tomado con inteligencia"

Por su parte Javier Gambino, de Identidad Viajes y Turismo, afirmó que prefiere tomarse la situación "con calma": "Tengo 30 años en el rubro, me comí fundidas de empresas mayoristas, paros de aerolíneas que dejaron pasajeros varados para ver la Fórmula 1 a Brasil. Uno se raya un poco y la verdad que yo no tengo ganas de andar vendiendo algo que a los dos meses tengo que reprogramar. Ya de por sí tengo que reprogramar viajes que tenían que salir ahora. No me quiero sumar problemas a futuro, prefiero tomármelo con más calma. No me agrada para nada, acá creen que ganamos fortunas y no ganamos mucho".

Respecto a cómo fue el trabajo estos meses, informó: "Paramos el 15 de marzo. Lo que estuvimos haciendo las primeras tres semanas fue repatriar a los pasajeros que teníamos en el exterior que llegaron, cumplieron con todos los protocolos de cuarentena y después empezamos a trabajar con los que iban a tener que salir en abril, en mayo".

Seguidamente, destacó: "Gracias a Dios la gente lo ha tomado con inteligencia. Esto no es culpa de nadie. Eso lo hablábamos entre todos los colegas. La gente dentro de todo se comporta consciente de lo que está pasando y prefiere viajar cuando se pueda con viajes ya pagos. Me parece lo más acertado. Vaya uno a saber cuándo se abra esto qué va a pasar con la economía. Tenía el caso de tres personas que tenían que ir a Egipto. Traté de asesorar y buscar lo mejor para el pasajero. Yo te pido la devolución pero te la van a hacer con lo que vos pagaste en octubre y te lo van a devolver en pesos, con eso no vas a poder pagar ni un pasaje y medio. Yo les digo 'yo que vos lo tomo con calma, te consigo para que hagas el mismo viaje año siguiente, misma fecha y todo' y listo. Es como que con el 2020 hay que arrancar la hoja del calendario". 

Sobre la caravana de esta semana, indicó que a través de la Ley de Emergencia Turística se busca una "ayuda real". "Que te digan 'les vamos a dar 100 mil o 200 mil pesos pero te lo doy a pagar en abril del año que viene', ejemplificó. 

"Estuvimos pagando como se pudo, a duras penas, lograron ingresar dos ATP y no sé para adelante, aparentemente creo que ayudarían hasta octubre, no lo tengo muy en claro. Deben haber dos o tres agencias que hacen cobranza de cuotas estudiantiles. Hay gente que sigue pagando esas cuotas pese a que el panorama es incierto de cuándo se va a poder viajar. De hecho Bariloche está complicado", agregó.

Pese al contexto, agencias de viaje aseguran que tienen consultas

Sobre el final se refirió a la importancia del trabajo online: "Ya veníamos de trabajar bastante por redes, con consultas desde la web, Facebook, Instagram, nosotros venimos con mucha gimnasia en ese sentido. Acá hay que pasar el invierno. Ahí hay que barajar y dar de nuevo. Está pasando julio y no se puede hacer nada. Creo que estamos recién ahora entrando en una etapa de pandemia. El tema es reconvertirse con el menor gasto posible, hoy por hoy es mucho Whatsapp, la gente se ha acostumbrado mucho a lo no presencial".

Y sumó: "Hoy por hoy, la gente tiene que poner en valor que los que han comprado con agencias locales tuvieron asistencia permanente, cosa que no ha pasado con las aerolíneas, con las que no han tenido una respuesta inmediata. Muchos han tenido que recurrir a nuestra ayuda. Eso hay que tener en cuenta porque muchos compran en forma directa a la aerolínea y después cuando se le arma el nudo tienen que recurrir a nosotros. Estamos asesorando mucho, esa es la realidad, cuando tenes que recurrir a un 0800 olvidate".

"Es algo muy duro"

A su turno Karen Abdala, al frente de Pólux, la última agencia que se abrió en San Francisco, habló acerca de su situación, quizá una de las más complicadas debido a que tanto ella como su marido se vieron fuertemente afectados por la paralización de la actividad turística y hotelera.

"Mi familia vive del turismo. Yo tengo la agencia y mi marido es empelado hotelero, por ende este parate nos golpeó directo. Es algo muy duro y que estamos atravesando de la mejor manera que lo podemos tomar. En el inicio no lo pude procesar tanto porque tenía seis pasajeros afuera, de los cuales cuatro pudieron volver al día siguiente del cierre de fronteras y dos llegaron el 26 de marzo con un vuelo de repatriación de Latam. No fue para nada fácil. No fue una situación linda. Deben haber sido unos 10 días que no dormí, que no comí, por la angustia, los nervios, sabiendo que son pasajeros míos y que les tenía que dar todo lo que podía desde acá, el apoyo psicológico, logístico y el mejor asesoramiento en cuanto a lo económico para que pudieran volver", explicó.

Después de eso, aseguró, vino la incertidumbre: "Después hubo desconcierto, tristeza porque uno se empieza a replantear la situación, vino como baldazo de agua fría, fue difícil. Una vez que pasó eso y con la ayuda de la familia estamos tratando de salir adelante".

En cuanto a cuál es el trabajo que vienen desarrollando desde que se permitió la reapertura de las agencias de viaje, detalló: "Desde que se dio el OK yo sinceramente no abrí por cuestiones económicas. Las ventas no nos aportan las ganancias necesarias para mantener el negocio. Con mis pasajeros sigo en contacto vía telefónica, Whatsapp, Facebook o Instagram, por el medio que ellos elijan, seguimos cerca de esa manera".

En ese sentido destacó que el Ministerio de Turismo les dio la posibilidad de trabajar de manera online hasta fin de año inicialmente. "Creo que lo piensan extender un poquito más. Estoy esperando a que nos permitan movilizarnos mínimamente dentro de la provincia donde podamos apuntar quizás a un movimiento turísitico interno y poniéndole toda la buena onda para que ojalá ya en septiembre, donde todo apunta para que se habiliten los vuelos internacionales, el turismo nacional ya esté funcionando", resaltó.

Abdala destacó que pese a la situación, la gente está interesada en volver a viajar. "Hay muchas consultas sobre destinos internacionales. Obviamente que el cierre de ventas no es el mismo que anteriormente porque todo el mundo está tratando de ver. Si bien las políticas de las aerolíneas y las cadenas de hoteles son muy buenas, mucha gente sigue con miedo o con dudas al respecto. El cierre de las ventas no es el mismo pero las consultas están y existen. Eso permite acercarte al pasajero que uno ya generó o al posible cliente en un futuro y te permite decirle 'acá estoy, sigo estando con vos y ofreciéndote lo mejor que se puede en esta instancia'", sostuvo. 

Respecto a cómo están trabajando sus colegas y a la posibilidad de una reconversión, indicó: "Sé de agencias que se trasladaron por motivos económicos, este fue un cambio que ofreció el Ministerio de Turismo, de habilitar en casa la atención con los protocolos necesarios".

Y cerró: "Reconversión al momento no. Tenemos que esperar a ver qué se dictamina en cuanto a transporte y hotelería y en base a eso tratar de avanzar y de respetar lo más que se pueda todo los protocolos necesarios para que el pasajero viaje a gusto, tranquilo y seguro, poniendo la mejor voluntad, las ganas y agradeciendo todos los días el aporte y el apoyo familiar que me permiten seguir soñando con sostener la agencia".