El titular del Programa de Atención Médica Integral (PAMI), Sergio Cassinotti, informó a los laboratorios, mediante carta documento, que rescindiría el contrato firmado hace sólo tres meses, en el que fija sus condiciones de compra de medicamentos para todo este año.

Frente a esto, la industria farmacéutica, advirtió que no aceptará la rescisión del acuerdo, sino que además lo conminó a saldar la deuda que tiene con los laboratorios por $ 952,7 millones a más tardar esta semana. De no hacerlo, anticipó, lo responsabiliza de todos los inconvenientes que pudiera generar la finalización del convenio, entre ellos, la falta de provisión de medicamentos con descuento para los afiliados, en su mayoría jubilados.

En la nota que le enviaron al director ejecutivo del PAMI, Sergio Cassinotti, los laboratorios agrupados en Caeme (extranjeros), Cilfa (nacionales) y Cooperala (cooperativas) rechazaron la carta documento del instituto que recibieron el 27 de abril, por considerarla "improcedente, abusiva y contraria al principio de buena fe", según consigna el diario La Nación.

En tanto, el convenio que cada año firma el PAMI es el más importante que tiene la industria farmacéutica con una obra social. El instituto financia entre el 50% y hasta el 100% del precio de venta de los medicamentos que consumen sus afiliados, lo que representó en estos meses el desembolso de unos $ 3000 millones mensuales (contra unos $ 2200 millones de 2016). Pero la nueva conducción, a cargo de Cassinotti, admite que el convenio firmado en enero está representando un gasto mensual superior al esperado, y aspira a recortar el presupuesto en unos $ 600 millones al mes.

Fuente: La Nueva Mañana