En el país cada vez más personas se suman al fenómeno de comprar on line productos, entre ellos los que llegan desde China, en la actualidad una moda. En general los consumidores compran electrónica, pero en menor medida también se interesan por la ropa, indumentaria, juguetes y accesorios.

Si bien existe una disminución en los precios con respecto al de nuestro mercado, los riesgos existen y suelen generar un gran dolor de cabeza. Puede pasar que a uno le entreguen un producto que no sea el de la fotografía, que una devolución demore mucho tiempo o que la factura no esté bien realizada. ¿Podés reclamar? Sí, pero al no haber una legislación clara para el comercio electrónico será difícil obtener resultados positivos.

Preocupa a comerciantes

Sin impuestos de por medio y con una mano de obra sensiblemente más barata, la competencia se convierte en “desleal”, aseguran los comerciantes locales.

Asociaciones empresarias señalaron días atrás que el avance de este tipo de comercio ya es “preocupante”, porque ha comenzado a representar una fuerte competencia y vaticinaron que, “si no se regula”, seguirá creciendo.

Los datos en torno a las compras de productos que llegan del extranjero con tarjeta de crédito son asombrosos. Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (Cace), en la Argentina había en noviembre unas 700 mil personas que ya compraban en sitios web del exterior, la gran mayoría chinos.

Cabe resaltar, que las restricciones de envíos postales de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) son que el paquete no puede superar los 20 kilos y no se pagan impuestos por montos no superiores a los 25 dólares. Superado ese valor, se debe abonar el 50 por ciento del excedente.