Las clínicas, sanatorios y hospitales de comunidad quieren que las obras sociales, el PAMI y las prepagas les reconozcan un alza del 11,5 por ciento en los aranceles médicos, por los mayores costos generados por la devaluación.

Según informa el diario Clarín, la respuesta de las prepagas sería negativa y sólo aceptarían pagar si la Superintendencia de Servicios de Salud les autoriza a aumentar la cuota de sus afiliados.

En diciembre fue el último aumento de las prepagas en su cuota (entre un 8 y un 9 por ciento). Sin embargo, consideran que ese aumento fue insuficiente y sostienen que acumulan un retraso de 9 puntos, a lo que se agregaría este posible aumento.

Jorge Cherro, de Adecra, la Asociación de Clínicas, Sanatorios y Hospitales Privados, especificó que durante enero hubo aumentos, entre otros, en los medicamentos, en los productos descartables, oxígeno, placas radiográficas y alimentos.

Buena parte de esas subas obedecen a la devaluación por la incidencia de las drogas y otros insumos importados.

Por su parte, la Confederación Argentina de Clínicas, Sanatorios y Hospitales (Confecisa) reclamó un recomposición de los valores prestacionales del 40%