Quince meses atrás, la ciudad se sorprendía al enterase de la noticia de que una joven, en aquel entonces de 21 años, había dado a luz en el baño del Hospital Iturraspe. El caso había sido más resonante aún, debido a que días atrás otro caso similar había ocurrido el Hospital Materno Neonatal de la ciudad de Córdoba.

El Periódico visitó a la protagonista de la historia, Jordania Souza, y a su pequeña Luisana, para ver cómo se encuentran a más de un año de aquel momento.

Se porta muy bien –empieza su mamá-, es un poquito rallada (ríe) pero es re buena, juega mucho, duerme bien, habla, dice papá, mamá, babau, esas cosas que dicen los chicos”.

No le gusta tanto mirar dibujitos, ella juega con sus juguetes”, cuenta Jordania, a quien se la ve feliz junto a su pequeña.

Mientras intenta retener a Luisana entre sus brazos, Jordania cuenta que tiene dos hermanitos: Matías, de cuatro años, y Francesca, de tres. La joven explica que por la mañana su otra pequeña va a la guardería y que el nene va jardín. “Ella queda acá. El año que viene va a empezar en la guardería Taglioretti. A veces se la lleva el papá, allá tiene una prima con la que juega, acá toca todas las cosas de mi mamá”, detalla.

Jordania: a 15 meses de la bendición más linda

Su curiosa experiencia 

Jordania también rememora su caso, que asombró a toda la ciudad y región: “Me internaron a eso de las doce de la noche. Fue complicado, no rompí bolsa pero tenía dolores, iba mucho al hospital. Me atendió una médica y me puso un calmante porque me dijo que era mejor que la retengamos y que nazca en su momento. Me dijeron que me quedara ahí para ver si seguía bien, pero resulta que ella quería nacer”.

Y sigue: “El medicamento que me ponían para dilatar me me daba náuseas, empecé a vomitar y debe ser que hice tanta fuerza que ella empezó a salir. Ahí pongo la mano y digo ‘la bebé, la bebe’. Pablo, mi expareja, salió corriendo a buscar a la médica y en eso vinieron las contracciones, empujé y salió ella, la quise agarrar pero no pude, se cayó en el piso del baño”.

“La habían llevado a Córdoba porque fue prematura, fue traumático para ella, no respiraba bien. En Córdoba estuvo diez días, fueron los peores de mi vida”, recuerda la mamá sobre los primeros días.

“Cuando vinimos a casa tuvimos que tener un poco de cuidado, de no sacarla mucho, pero arrancó bien después de que volvimos y mirá lo que es ahora, está perfecta”, concluye.

Estudios

Jordania cuenta que está por empezar a trabajar: “Estudié enfermería, para trabajar con ancianos, y ahora me conseguí un trabajo de eso. En quince días empiezo”.

El caso

El caso tuvo lugar el 23 de julio de 2015. Jordania ingresó con dolores al hospital y a las pocas horas dio a luz a Jordania, su tercer hijo. Lo curioso es que la niña, que pesó 2.500 kilogramos, nació en el baño, adelantándose a todos los pronósticos. Hoy tiene un año y tres meses y  goza de una excelente salud.