Daniel “Tattoo” Rivarossa (56) está en el entrepiso de su “santuario”, su local comercial ubicado en pasaje Newton al 1800 (plaza Cívica), en plena sesión artística. 

Ingresar a “El inmortal Tattoo club”, como ha denominado a su local, es una experiencia en sí misma. Con una ambientación que mezcla elementos y estilos de diferentes épocas, uno no puede dejar de mirar los muebles, pinturas, juguetes, cráneos, espejos, fotos antiguas y esculturas de las más diversas formas que hacen voltear la mirada a diestra y siniestra.

Ya en el entrepiso, “Tatto” se encuentra dibujando en el antebrazo de un joven un considerable león en un estilo black and grey (negro y gris) con técnica de arrastre.